El Programa de desarrollo de las Naciones Unidas ha publicado que, por quinto año consecutivo, los países del norte de Europa son los más felices del mundo según el índice de felicidad establecido por dicho programa. Este año, encabeza la lista Noruega, y se consolida como el país más feliz del planeta. Este programa mide la calidad de vida de 150 países y lo lleva haciendo desde 2012.

El programa diferencia los temas que son más relevantes para medir la felicidad del país. El producto interior bruto, las ayudas sociales, la esperanza de vida, la libertad, la generosidad y la falta de corrupción.

Los países que copan la lista - Noruega, Dinamarca, Islandia y Suiza – obtienen unos resultados fabulosos en todos estos ámbitos y logran alrededor de 7.000 puntos, sacando una diferencia de 3.000 puntos con los países que están a la cola. Dato que dice mucho sobre la diferencia abismal en todos los sentidos que unos países tienen con respecto a otros.

Nuestro país se sitúa lejos del top 10 de la lista. España se encuentra en el puesto número 34. Mientras que países como Estados Unidos, Alemania y Francia están colocadas en los puestos 14, 16 y 31, respectivamente. Con lo cual, España está por detrás de estos tres países que a priori parecen semejantes a nosotros. El caso de Estados Unidos es curioso.

Si tenemos en cuenta que Noruega el año pasado se encontraba en quinta posición y hoy es el actual país más feliz del mundo, podemos pararnos a pensar qué es lo que pasa con Estados Unidos y preguntarnos por qué no asciende a los primeros puestos de la lista.

Los investigadores aseguran que es debido a que la crisis norteamericana no es una crisis económica sino social que durante años se ha ido alargando y no ha tenido una respuesta apropiada por parte de los gobiernos.

Si se comparan los resultados de los 5 países nórdicos con el modelo americano, emerge que EE.UU. tiene un peor resultado pese a tener un PIB per cápita más alto. Con lo cual a la hora de tratarse de felicidad, el modelo escandinavo supera al famoso “sueño americano”.

África, en busca de la felicidad

El informe del programa afirma que el mayor crecimiento africano desde hace años ha coincidido con la recesión economica de los paises europeos.

El documento también redacta que África ya no es conocida por los regímenes dictatoriales, sino por la ingente inversión de capital extranjero para el desarrollo de su economía. Sin duda parece un dato esperanzador para que el continente africano salga poco a poco de la desigualdad en la que se encuentra.

Edita Hrdá, presidenta del UNDP, recalcó la importancia que adquiere el concepto de felicidad y que es muy importante prestar más atención a la felicidad para un mejor desarrollo.