El propio personal de una organización es el individuo fundamental y principal en un proceso de análisis del clima laboral en su organización. Tiene que tener la condición de actuar y colaborar de manera limpia, respondiendo siempre con independencia propia, tanto psíquica como mental, a las diversas encuestas o cuestionarios que se le presenten.

Frecuentemente, suele ocurrir que se presentan elementos perturbadores del grado de objetividad que se necesita. Varias razones que pueden llegar a pasar para que esto sea así. Podemos nombrar 9 elementos perturbadores habituales:

  • Empleados que se enfrentan con los directivos, con la propia organización o con sus mandos, tanto en su fuero interno como abiertamente.
  • Empleados desconformes con el salario que reciben.
  • Empleados que se sienten desmotivados por su trayectoria en la organización.
  • Empleados que simpatizan o se encuentran afiliados a algún tipo de sindicato que se lleva a cabo siguiendo instrucciones o consignas de ellos.
  • Empleados que tienen contratos laborales temporales, de poca durabilidad y que ya saben o consideran que no continuarán en la empresa.
  • Empleados que se encuentran expedientados o sancionados anteriormente y sientes resentimiento con sus líderes.
  • Empleados que se consideran o se encuentran explotados por la propia organización, que hacen varias horas de trabajo y ello no se encuentra reflejado en sus nóminas.
  • Ciertos empleados que realizan, la mayoría de las veces, sin ninguna otra razón que la de su propia constitución psicológica y mental, un trabajo de deterioro y erosión de su relación con sus compañeros laborales o entre ellos y sus mandos.
  • Empleados que viven o al menos consideran que viven en un clima laboral malo en su entorno de mandos y compañeros.

Todas las situaciones mencionadas anteriormente y varias otras más que podrían enumerarse, hacen mucho más difícil la realización de los procesos de medición del propio clima laboral.

Pero no por ello lo imposibilitan. Hay que tener en cuenta la existencia de estas situaciones que gran número de veces son justamente las que se necesitan descubrir en un cuestionario o una encuesta de clima laboral. Estas situaciones son parte del clima laboral en sí, y forman parte del mismo.

Por éste y otros motivos es muy importante la previa preparación de los empleados, en todo su conjunto, para dejar en claro que es lo que se pretende, para qué y por qué. Debe saberse como tomar especiales medidas en la evaluación y corrección de los resultados que se obtuvieron con las encuestas o los cuestionarios, para así poder bajar el peso de los factores que perturban negativamente en su realización que pueda llegar a existir.

Si en la organización existe una representación sindical lo más recomendable es plantear antes el proceso que se quiere llevar a cabo a sus delegados o representantes. Se debe saber como explicarles correctamente las razones que tiene la organización para realizarla y la pretensión que tiene con ello. Generalmente, de esta manera se obtiene la comprensión y el apoyo de los representantes sindicales de la organización o los jefes, lo que puede ayudar a futura con la colaboración de los empleados.