“Las oportunidades grandes nacen de haber sabido aprovechar las pequeñas” (Bill Gates)

Tal y como mencioné en un artículo anterior sobre el efecto mariposa, un pequeño cambio puede generar grandes resultados y este ha sido el caso de las pymes a nivel mundial. Según Randstand, empresa española dedicada a la consultaría empresarial, el 33% del Producto Interno Bruto mundial proviene de las pymes.

Esto debido a varios factores como su flexibilidad y su capacidad de adaptación a las transformaciones del mercado. A diferencia de las grandes empresas, las pymes promueven la individualización frente a la estandarización.

Sin embargo esto no significa que no haya relación entre ambos tipos de empresa, ya que las pymes se han convertido en un tejido auxiliar que le permite a las grandes empresas disgregar su modelo de negocio mediante la subcontratación , maximizando el tiempo y reduciendo costos.

¿Qué es una pyme?

Las pymes son aquellas empresas que se definen por la cantidad reducida de empleados, volúmenes de negocios (cantidad de capital adquirido) y sus balances (Estado del activo y del pasivo de la empresa). Según la legislación de la Comisión Europea dentro de la categoría de las pymes se encuentran las medianas, las pequeñas y las microempresas. Las medianas son aquellas que tienen entre 50 y 249 trabajadores, con un volumen de negocio o balance de máximo 50 millones de euros.

Por su parte, las pequeñas empresas son aquellas que tienen entre 10 y 49 trabajadores y tienen un volumen o balance de máximo 10 millones de euros. Finalmente las microempresas son aquellas que tienen menos de 10 empleados y un volumen o balance máximo de 2 millones de euros.

Importancia de las pymes

Aparte de significar el 33% del PIB mundial, las pymes constituyen el 99% de los negocios de la Unión Europea, convirtiéndose en el pilar de su Economía debido a los altos estímulos al emprendimiento e innovación.

Este ha sido un modelo que le ha permitido a varios países afrontar diversas crisis económicas ya que estimula el consumo interno y genera una gran parte de los empleos formales. Por este motivo los países deberían concentrarse en incentivar este sector con mecanismos de financiación accesibles.

Ventajas y desventajas de las pymes frente a grandes empresas

El modelo de las pymes les permite ser mucho más cercano con los clientes ya que pueden conocer de manera más cercana las necesidades y ofrecer un producto personalizado. Dicha cercanía le permite a las empresas detectar y aprovechar con mayor facilidad los pequeños nichos del mercado. Son además empresas muy flexibles por su tamaño y estructura reducida que les permite adaptarse a cambios del marcado. Por otra parte resulta más fácil vincular al personal con los objetivos de la empresa.

Sin embargo son empresas que por su pequeño musculo financiero se ven afectadas en la competitividad de sus precios. A empresas grandes les resulta más fácil ajustar los precios de sus productos por su economía de escala, mientras que las pymes al depender en su mayoría de financiación externa se ven limitadas en este aspecto.

Por su reducido tamaño les resulta un reto aumentar su base de clientes ya que no cuentan con plataformas masivas de divulgación como las grandes empresas.

Pymes en España

Las pymes en España son una parte vital de la economía nacional, representando el 65% del PIB nacional; no solo constituyen el 99.9% del tejido empresarial sino que han sido el motor de desarrollo económico que le permitió al país recuperar su economía luego de la recesión del 2008. Significan el 51% de las importaciones y el 49% de las exportaciones según AEMME (Asociación Española de Multisectorial de Microempresa).

Siendo un porcentaje alto del tejido empresarial, las microempresas constituyen el 97.6% de las pymes, mientras las pequeñas empresas son el 1.9% y las medianas el 0.5%.

Esto nos permite ver que España es un país donde las pymes significan una gran parte del mercado al tener solo un 0.1% de empresas grandes que tiene una facturación mayor a 50 millones de euros. Como resultado a esa amplia oferta, las pymes se han convertido en la principal fuente empleo formal, aportando según el Instituto Nacional de Estadística el 66% de los empleos.

Nuevamente se comprueba que no es necesario ser el más grande para generar cambios significativos que generen impacto.