El Rayo Vallecano no gana para disgustos con el Estadio de Vallecas. La mala conclusión de las obras llevadas a cabo en verano, unido a una instalaciones anticuadas y deterioradas, provocaron los primeros incidentes durante la primera jornada de Liga. Un niño de cuatro años se precipitó a un agujero en el fondo lleno de material de obra y ladrillos; y los aficionados situados en la tribuna lateral temieron un derrumbe al notar que la grada vibraba cuando saltaban los aficionados visitantes, llegando a pedir que cesaran los botes. Ahora, se confirma que el estadio será cerrado.

El Rayo, la Comunidad y la Liga acuerdan el cierre del Estadio de Vallecas

Según informa la Plataforma ARDV, durante toda la tarde se ha estado produciendo una reunión en la sede de la Liga entre el Rayo, la Comunidad de Madrid y la Liga donde se ha confirmado el cierre parcial del Estadio de Vallecas. Se arguye la falta de seguridad de la infraestructura después de no estar culminadas las obras de remodelación.

Fuentes cercanas al club aseguran que peritos de la Comunidad han estado observando durante la semana pasada las deficiencias del campo vallecano, conociendo hasta qué punto puede ser perjudicial para los aficionados seguir acudiendo a su correspondiente localidad.

Se baraja que permanezca clausurado de momento hasta mediados de octubre.

Los rayistas estallan en las redes y culpan a Presa

Mientras se espera el lugar donde disputará el Rayo Vallecano sus partidos como local, los rayistas ya se han manifestado en las redes en contra de lo que denominan una "mala gestión". Creen que se está faltando el respeto a una afición ilusionada por el regreso a Primera División, además de no contar con ellos ante las dificultades que pueden entrañar los desplazamientos.

También sienten que el rendimiento del equipo bajará al jugar en otros terrenos donde no están acostumbrados y donde el ambiente puede ser diferente al respirado en Vallecas.

Los abonados culpan a Raúl Martín Presa, máximo mandatario de la entidad franjirrojo, de no haber estado a la altura en la administración de este problema.

También se pone en el punto de mira a la Comunidad de Madrid, la cual cedió el estadio en los años 80 al Rayo, pero su mantenimiento depende de ella.

Los partidos solo podrían disputarse en Getafe, en el Wanda o en el Santiago Bernabéu, ya que en Butarque no entrarían todos los abonados. El Getafe previsiblemente es el que gana enteros, ya que en el estadio del Atlético ya juega el Rayo Majadahonda y el Real Madrid es reacio a dejar su campo. Por tanto, salvo sorpresa, los próximos partidos se jugarían en Getafe.