Este miércoles 16 de mayo, en Lyon, Francia, se jugará la gran final de la Europa League entre dos clubes con recorrido e historias reconocidas. El equipo español Atlético de Madrid juega una nueva final y lo hará contra el sorprendente y modesto equipo francés Olympique Marseille. Los caminos de ambos finalistas han sido muy diferentes. Los españoles vinieron de ser eliminados en fase de grupos de la Champios League, a manos de los equipos Roma y Chelsea, que terminaron primero y segundo respectivamente. El Atlético, al quedar tercero, se sumó a la lista de participantes de la Europa League a partir de los dieciseisavos, pasando con autoridad cada una de las fases siguientes hasta colocarse en la cita final.

Lo que para ellos parecía un rotundo fracaso se convierte hoy en una oportunidad de alegría para todos sus aficionados. Los franceses, por su parte, han venido de menos a más, puesto que terminaron segundos de su grupo, doblegados por su reciente rival en semifinales, el Salzburg, ante los cuales tuvieron la oportunidad de vengarse para situarse nuevamente en una final después de muchos años, llenando de ilusión hasta a los más escépticos seguidores.

Obligados a ganar

El Atlético no solo parte como favorito, sino que ante los ojos del mundo entero están obligados a ganar. En primer lugar porque, desde que fueron eliminados de la Champions, lo que era su gran propósito, lo menos que se le pedía era ser campeones de la Europa League.

Ya han demostrado que su nivel de Fútbol es más competitivo, y por su plantilla y su sistema de juego, no deberían tener problemas para alzarse con la corona. De esta forma, revalidarían el título obtenido en los años 2010 y 2012, obteniendo su tercer campeonato y situándose junto a Juventus, Inter y Liverpool, como segundos máximos ganadores de la competición, después de sus paisanos, el Sevilla FC, que tiene 5.

Esto se sumaría al más que probable sub-campeonato de liga, donde el Barcelona ha terminado campeón, lo que los dejaría con un agradable sabor de boca por la temporada realizada.

Para lograr la victoria, cuentan con la experiencia de las finales recientemente jugadas por varios de sus actuales jugadores. Hablo de las finales de Champions League contra su acérrimo rival, el Real Madrid, primero en Lisboa y acto seguido en Milán.

De la mano de su jugador ícono, Griezmann, y de otros como Diego Costa, Koke, Saúl, Godín y su gran portero Oblak, confían en levantar la copa. Una derrota significaría un gran fracaso.

Con la ilusión de dar la sorpresa

Por su parte, y guiados por su jugador más en forma, F. Thauvin y su líder D. Payet, los franceses quieren dar la campanada, demostrando que su crecimiento futbolístico no es fruto de la casualidad. Además juegan en su país, en un campo donde ya han jugado esta campaña. En Liga han combatido por mantenerse en puestos europeos, pero nunca con posibilidades de ser campeones ante un PSG intratable. Ganar esta final sería la guinda de una temporada fantástica, que trae a su mente recuerdos de la única vez que levantaron un título europeo en el 1993, cuando levantaron la orejona, después de ganar la final de la Champions League ante un histórico Milan.

Es la quinta final que compiten, y la tercera en esta competición. ¿Será la tercera la vencida?

Alineaciones probables

El Olympique puede salir con su once habitual: Mandanda, Sarr, Rami, Rolando, Amavi, Luiz Gustavo, Lopez, Payet, Ocampos, Thauvin y Mitroglou. Por su parte el Atlético saldrá con su once de gala: Oblak, Lucas, Godín, Jiménez, Vrsalijko, Tomas, Gabi, Saul, Koke, Correa, Diego Costa y Griezmann. Simeone, técnico colchonero, tratará de guiar a los suyos a ser campeones en el mismo torneo donde los catapultó a la élite.