Ayer a las 22.00h hora española (16.00h en Nueva York) todos los ojos de todos los españoles estaban atentos a la gesta que Rafa Nadal podía lograr, agrandando su leyenda frente a Kevin Anderson, que venía avalado por su gran torneo con un promedio de 83 por ciento de puntos ganados en el primer saque, haciendo valer su potente servicio y sus más de dos metros de altura. Anderson era el primer sudafricano en llegar a la final de este torneo neoyorquino desde 1965, por lo que en su país se vivió la final con la ilusión y la importancia de una cita deportiva histórica.

El sudafricano empezó con fuerza y sin nervios a pesar de que era su primera gran final, que llega a sus 31 años, en el ocaso de su carrera deportiva

En el primer juego consiguió dos servicios directos que llegaron a los 217 km por hora, lo que obligó a Nadal a colocarse al fondo de la pista, rozando la valla, para restar el servicio de Anderson.

Poco a poco, el sudafricano fue cediendo ante la seguridad y el acierto de Nadal, que no concedió ni un juego en todo el partido y supo explotar las debilidades del rival, ganando todos los puntos en los que se acercó a la red y obligando al sudafricano a jugar puntos largos y peloteos.

El manacorí no dio opción a Kevin Anderson que cayó en tres sets, 6-3, 6-3 y 6-4, en un partido intenso en el que en todo momento Nadal estuvo en cabeza a pesar de un contrincante que se defendió bien en su primera gran final

Este triunfo es el tercero de Rafa Nadal en las pistas de Flushing Meadows, los anteriores triunfos bajo el cielo neoyorquino fueron en 2010 y 2013, su segundo Gran Slam del año, tras ganar Roland Garros, y el decimosexto de su carrera deportiva.

En las gradas del estadio no faltaron personalidades del mundo del deporte, de los negocios y del espectáculo que no quisieron perderse esta histórica final. Entre los asistentes pudimos ver a Tiger Woods acompañado de su hijo animando apasionadamente a Rafa, tampoco se quiso perder la cita el fundador de Microsoft y uno de los hombres más ricos del mundo, Bill Gates, que es un reconocido fan del tenista español.

Tampoco faltaron los actores John Turtullo o Hilary Swank, los extenistas Stefan Edberg y Manolo Santana o el magnate y empresario Rupert Murdoch

Hasta ahora, al número uno del mundo sólo se le ha resistido uno de los grandes torneos, la ATP World Tour Finals de Londres, que será su objetivo para este año y en caso de ganar, se convertiría en el primer tenista en la historia en ganar todos los Grand Slam, y le acercaría todavía más al récord de 19 títulos que posee Roger Federers