Un trabajo publicado en la revista Scientific Reports determinó que las jirafas eran capaces de realizar cálculos estadísticos. El equipo de Federica Amici llevó a cabo unas pruebas en el zoo de Barcelona en las que a las dos jirafas macho y dos hembras se les daban a elegir comida dentro de un puño cerrado. Previamente, la comida era extraída de dos recipientes transparentes con zanahoria y calabacín.

La jirafa sabía de qué recipiente salió cada mano

El psicólogo de la Universidad de Barcelona, Álvaro Caicoya, explicó que la jirafa sabía de qué recipiente salió cada mano, aunque no sabía qué había en cada puño cerrado.

Acto seguido, el especialista dijo que el animal elegía de qué cubo quería que saliera su trozo y añadió que no elegía el trozo que quería sino el cubo. Además, recordó que las jirafas tenían predilección por la zanahoria.

Álvaro Caicoya comentó que ahora solo adaptaron a las jirafas los experimentos que habían sido realizados en primates y loros. El psicólogo comentó que en la serie de pruebas se utilizaron proporciones diferentes para determinar si el animal estaba utilizando información como pistas involuntarias de los encargados del experimento o su sentido del olfato.

En ese contexto, las jirafas seleccionaron el recipiente con más probabilidades de contener la zanahoria en al menos 17 de 20 ensayos.

Previamente, La capacidad de hacer cálculos solo había sido detectada en Animales como primates y loros. Aunque los especialistas reconocieron que antes no habían sido realizadas las pruebas con animales de cerebros más pequeños como las jirafas.

Las jirafas son buenas eligiendo su comida

También el psicólogo de la Universidad de Barcelona recordó que antes se creía que hacer cálculos era solo una cosa de seres humanos.

Álvaro Caicoya remarcó que ahora comprobaron que las jirafas eran buenas eligiendo su comida a través de sus cálculos estadísticos básicos.

El especialista explicó que un experimento en el pasado comprobaron que las jirafas eran buenas eligiendo cantidades. Los animales se exponían a diferentes cantidades de comida y elegían la mayor.

Álvaro Caicoya incluso comentó que las jirafas podían recordar 30 segundos donde habían escogido su comida.

Por eso, Álvaro Caicoya dijo que si las jirafas podían determinar en la sabana africana que árbol tenía una mayor proporción de hojas, entonces podrían ahorrar mucha energía. El doctor en biología Antonio José Osuna Mascaró sostuvo que el comportamiento de esta especie podía ser el resultado de una capacidad cognitiva elevada o la adaptación a su modo de vida.

Las jirafas podrían administrar mejor sus energías

Antonio José Osuna Mascaró remarcó que gracias a las habilidades detectadas en los estudios, las jirafas podían administrar mucho mejor sus energías cuando se desplazaban para buscar comida.

El doctor en biología también comentó que el tamaño del cerebro de las jirafas no era un factor limitante. Finalmente, el experto dijo que ahora sabían que la vida social de esta especie era muy similar a la de los elefantes.