Una Mujer ha tomado el sol con aceite de zanahoria y se ha quemado todo el cuerpo, tras haber estado más de siete horas en la playa. La mujer es de origen británico, su nombre es Laura Bevin, y tiene 24 años. Según ha explicado a los medios, eligió utilizar aceite de zanahoria y no crema para combatir los efectos de los rayos solares. La chica ha comentado que su “piel cruje como pollo frito” para narrar en pocas palabras su estado actual tras las quemaduras, por el deseo de tener una piel bronceada.

Laura ha tenido que ser ingresado en un hospital ante la gravedad de las quemaduras que recibió en todo su cuerpo, después de horas al sol.

Algunas de las quemaduras que la mujer recibió van a permanecer con cicatrices o marcas durante toda su vida, y otras con el paso del tiempo y el tratamiento médico desaparecerán lentamente. Aunque ya ha sido dada de alta, ahora deberá cumplir con un estricto tratamiento pautado por los sanitarios.

El procedimiento clínico para curar las heridas que recibió la chica de 24 años en la playa

Los sanitarios, después del ingreso de la mujer en el hospital, han aplicado un procedimiento complejo para retirar partes de la piel que estaban totalmente calcinadas, por los duros efectos de los rayos del sol, que hicieron sus efectos durante horas en el cuerpo. En las partes más afectadas de su cuerpo, ha sufrido infecciones que deberán ser tratadas con antibióticos durante 10 días, aproximadamente.

La mujer ha narrado cómo era su piel después de que dejó de tomar el sol por unas siete horas

“Roja como un tomate” era la piel, así ha narrado Laura Bevin el color de su piel después de estar siete horas al sol, para finalmente irse del lugar. La chica ha relatado que al subirse al coche se pudo dar cuenta de lo graves que eran las quemaduras que había en todo su cuerpo.

La mujer ha confesado que le preocupaba su hija pequeña y le aplicó crema solar a la menor, a pesar de ello, ella misma se quedó sin colocarse la crema protectora.

El doloroso y traumático día después de que Laura Bevin tomó el sol durante siete horas

Laura Bevin ha revelado que el día después de mantenerse durante las siete horas al sol, no podía moverse, y que al intentar aplicar lociones a las partes afectadas, los resultados fueron peores, ya que le salieron ampollas en su cuerpo.

La chica ha relatado que ese hecho la obligó a ir rápidamente al hospital para recibir atención de los sanitarios. En el complejo hospitalario, uno de los sanitarios le desprendió un trozo de piel quemado, que parecía “piel de pollo”. Bevin ha dicho que ahora le “tiene miedo al sol”. Esta mujer estaba acompañada de su madre y su hermana en el momento del incidente en la playa.