El espíritu navideño ya se hace notar en todas partes. El árbol de Navidad, el Belén, la carta a los Reyes Magos, los mercadillos navideños etc. Estos son el punto de encuentro de pequeños y mayores que van a dar un paseo entre los puestecillos y ver los adornos navideños, figuritas, artesanía y juguetes; a disfrutar de los productos típicos o incluso a ver algún espectáculo. En países como Alemania o Austria tienen una larga tradición con mercadillos de hasta más de 400 años sin los que la Navidad no sería lo mismo.

Los mercados navideños en Alemania

Alemania es el destino de los mercados de Navidad por excelencia. Los puestecillos típicos invaden las calles de ciudades como Munich, Berlín, Friburgo, Nürenberg o Dresden. Sin embargo, el Christkindlesmarkt de Nürenberg es un imprescindible. Lleva realizándose más de 400 años y cuenta con una decoración espectacular que combina con el estilo medieval de las calles de la ciudad. En estos mercadillos podrás encontrar adornos navideños y probar sus especialidades como el Glühwein, un vino caliente especiado, y las Lebküchen, unas galletas de mantequilla con especias y miel.

Además destacan otros como el que se celebra en Dresden, el más antiguo del país. El más conocido se celebra en la antigua plaza del mercado, el Altmarkt, en el centro histórico.

Este se llena de puestos con delicias tradicionales e ideas para tus regalos. También hay que destacar el que se celebra en Dortmund, que cuenta con el árbol de Navidad (Tannenbaum) más alto de Alemania.

¿Cómo son los mercados en la navidad Suiza?

Otro país que no podía faltar en la lista es Suiza que cuenta con mercadillos preciosos en todas sus ciudades.

Desde el que se realiza en Basilea en la Barfüsserplatz y alrededor de la iglesia de Barfüsserkirch en el casco histórico, hasta el más grande de todo Europa que tiene lugar en la Estación Central de Zurich. Otro imprescindible es el de Montreux, en el que sus más de 150 puestos forman un pequeño pueblecito. Por último, si vas a Suiza no puedes perderte la ciudad de Lucerna y disfrutar de su mercado lleno de estrellas, luces y artesanía.

Estos se celebran entre el 22 de noviembre y el 24 de diciembre.

Austria y su navidad pacífica

Si viajas en estas fechas a Viena, Salzburgo o Innsbruck verás las calles repletas de adornos navideños, luces y de casetas de madera en las que se vende desde artesanía local hasta objetos decorativos de lo más variado. En la capital, los mercadillos más populares son, por un lado, el que se sitúa en frente del Ayuntamiento y, por el otro, el que tiene lugar en frente del palacio de Schönnbrun. Pero si buscas un ambiente más despejado por el que poder pasear tranquilamente también puedes visitar el mercadillo de Karlplatz o el del barrio de Spittelberg.

El mercado de la Gran Place en Bélgica

Otro imprescindible.

En Bruselas la Gran Place se llena con más de 200 puestos, un gigante árbol de Navidad y la pista de hielo de Saint-Catherine. Además desde Bruselas es muy fácil viajar en tren a ciudades como Brujas, Gante, Amberes o Lovaina. Todas ellas son espectaculares en Navidad, sin embargo Brujas es una de las ciudades europeas más bonitas y su mercadillo en el centro histórico cuenta con miles de tiendecitas donde podrás encontrar cualquier producto navideño. El mercadillo de Bruselas se inaugura el 25 de noviembre y termina el 1 de enero.

Tallín, su mercado navideño y su ciudad medieval

Tallín, también conocido como "la pequeña Praga" es una de las ciudades medievales más bonitas de Europa. Si viajas en Navidad lo más probable es que tengas la suerte de verla nevada.

La ciudad celebra la Navidad con sus mercadillos en el casco antiguo que está rodeado por una muralla. El principal se sitúa en la Plaza del Ayuntamiento y cuenta con más de 50 puestos con adornos, artesanía y productos típicos. Tiene lugar del 18 de noviembre al 7 de enero.

Los mercados navideños en Praga

En Praga también encontrarás algunos de los mejores mercados. En la Plaza de la Ciudad Vieja, junto al reloj astronómico, se encuentra el más conocido. La plaza se decora con un gran pesebre y se llena de puestos y tiendecitas con productos tradicionales y locales. Además de este, también es muy famoso el mercado de la Plaza de Wenceslao y otros más pequeños como el de Vinohradi o el de la Plaza de la República.

Estos abren del 29 de noviembre al 6 de enero.

La navidad y los mercados en España

Por último en España no nos quedamos atrás. Aunque no tengamos una tradición de mercadillos tan arraigada como estos países también celebramos algunos muy populares. En Madrid, el más antiguo y tradicional se celebra en la Plaza Mayor. Cuenta con más de 100 puestos en los que podrás encontrar adornos navideños, belenes, figuritas y visitar el mercado de artesanía de la plaza de Santa Cruz. El mercado abre sus puertas del 24 de noviembre al 31 de diciembre.

También en Madrid, en la Plaza de España se organiza una Feria de Navidad. Esta está más dirigida a productos de artesanía de alta calidad. Podrás curiosear entre los distintos puestos de cerámica, jueguetes hechos a mano, orfebres, joyeros o trabajadores del cuero.

Esta feria está abierta desde principios de diciembre hasta el 5 de enero.

En Barcelona, en la plaza en frente de la catedral encontrarás la Fira de Santa Llúcia (Feria de Santa Lucía). Se trata de un mercado curioso en el que hay desde los puestos más tradicionales con figuritas para el Belén hasta los puestos más modernos. Si vas, no olvides hacerte con una ramita de muérdago para que te traiga buena suerte. Se celebra desde el 24 de noviembre al 23 de diciembre.