Varios estudios realizados en el último mes entre ellos el realizado por especialistas de la Facultad de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid dentro del proyecto de investigación Vida-Covid-19, que se desarrolló para conocer los efectos psicológicos de la pandemia del Coronavirus y el confinamiento en la población de España, han concluido que un 22% presentan síntomas de depresión siendo más acusados estos en mujeres y en jóvenes. Estas cifras tienen una tendencia exponencialmente más alta que durante los períodos regulares de tiempo, cuando, por ejemplo, los síntomas de ansiedad de moderada a severa alcanzan en la población general un pico del 5%.

Son muchas las personas que temen contagiarse del COVID-19, toda esta situación novedosa y llena de incertidumbre que vivimos, acompañadas de pérdidas de familiares o pérdidas económicas provoca que elaboremos nuevas ideas, creencias y esquemas mentales que van a estar en la base de lo que sentimos y que serán los que determinen nuestra conducta depresiva y ansiosa.

Los jóvenes presentan más ansiedad, depresión y soledad por el coronavirus que los mayores

Esta mayor incidencia en los jóvenes parece obedecer a sentir "amenazados" sus proyectos vitales y de percibir que sus circunstancias económicas les hacen estar en una situación más desfavorecida, lo cual puede exacerbar sus inseguridades y temores.

La tristeza unida al estrés crónico generan un agotamiento psicofísico que va a ser la base de todas las secuelas psicológicas. Esta realidad puede justificar que el consumo de alcohol ha ido en aumento durante el brote del virus. Mientras que la OMS concluye: "Las personas deben minimizar su consumo de alcohol en cualquier momento, y en particular durante la pandemia de COVID-19".

Beber alcohol en exceso también puede poner en peligro la salud mental, incrementa el riesgo de depresión, disminuye nuestra resiliencia y capacidad de manejar el estrés y puede complicar o causar el desarrollo de trastornos de salud mental.

Los sanitarios también están en riesgo de sufrir depresión y estrés postraumático

Los sanitarios están sometidos a una sobrecarga de trabajo, a la que hay que añadir una sobrecarga emocional.

Toman decisiones que afectan a la vida de las personas, el dolor de ver morir a tanta gente, comunicar a los familiares la pérdida de un ser querido, sufren impotencia por la falta de medios es lo que describe Fernando Chacón, decano del Colegio de Psicólogos de Madrid. Los investigadores consideran fundamental descubrir, evaluar y refinar las intervenciones para abordar aspectos psicológicos, sociales y neurocientíficos de la pandemia.