A través de un comunicado, la NASA informó que la construcción de las naves espaciales para el transporte de astronautas a la Estación Espacial Internacional (EEI) va encaminada. Actualmente, se encuentran en la etapa de prueba siendo este el último escalón antes pasar a la fase de la aprobación final.
Para el desarrollo del proyecto, la NASA se alió con las compañías SpaceX y Boeing, las cuales construyen sus propias naves por separado, con el objetivo de reemplazar a la nave de fabricación rusa, Soyuz, que es por los momentos la única que puede transportar una tripulación a la EEI.
Además, el contrato con la empresa rusa culminó en noviembre de 2019.
De acuerdo con la NASA, ambas empresas realizarán pruebas de vuelo autónomo y tripulado para determinar si están aptas para el transporte de seres humanos a la órbita espacial de manera segura y confiable.
Nave: Dragón 2
La empresa estadounidense de transporte aeroespacial, SpaceX, ya programó la prueba sin tripulantes o Demo-1 para el mes de noviembre de 2018 de la nave Dragon 2 o Crew Dragon mientras que el test con personal incluido o Demo-2 se realizará en abril de 2019.
En 2014 el gobierno de los Estados Unidos invirtió 2.600 millones de dólares en la compañía de Elon Musk para el desarrollo del transporte espacial.
Nave: C100 Starliner Boeing
En la Planta de Procesamiento de Carga y Tripulación Comercial del Centro Espacial Kennedy de la NASA en Florida, se lleva a cabo la construcción de tres naves espaciales C-100 Starliner cuya inversión ronda los 4.200 millones de dólares. Las mismas están diseñadas para ser reutilizadas hasta 10 veces.
La prueba sin tripulación o prueba de vuelo orbital de una de las C-100 Starliner se ejecutará a finales de 2018 o inicios del 2019. Por otra parte, el vuelo tripulado está pautado para mediados del próximo año. La NASA indicó que Boeing realizaría su lanzamiento antes que SpaceX pero surgieron problemas técnicos con el sistema de interrupción del vuelo de emergencia por lo que tuvieron que retrasar el proceso hasta corregir los errores.
Una vez que ambas naves hayan pasado las pruebas, deberán pasar por un proceso de certificación por parte de la NASA, la cual determinará si están en condiciones para los vuelos espaciales. Al respecto, la Oficina de Contabilidad del Gobierno (GAO), empresa independiente que investiga el gasto federal de EEUU, presentó un informe donde destaca que SpaceX podría obtener el certificado en febrero de 2020 y Boeing en enero de dicho año.
Cabe destacar que en el 2011, la NASA retiró a los astronautas que se encontraban en la EEI por lo que tienen la intención de retomar el envío de personal hacia esta con el objetivo de continuar con las labores de investigación que se venían llevando a cabo.