La ECHA, Agencia Europea de Sustancias y Preparados Químicos, reconoció este mes julio pasado, que el BPA o bisfenol A, es una sustancia altamente contaminante para el medio y mutagénica para el ser humano. Frente a las quejas y contradicciones de muchos sectores de la industria y científicos.
No sabemos a lo que nos exponen
Se usa en todo tipo de plásticos policarbonados como en latas de comida y bebida, recibos de compra y banco, CDs, e incluso, en biberones.
Tras realizar un estudio, según el centro de Control y Prevención de Enfermedades, nos ha mostrado que en un 90% de los estadounidenses contienen restos de esta sustancia en su sangre y tejidos.
Efectos adversos mortales
El Centro para el Control y Prevención de enfermedades, publicó una investigación donde se detallaba que el 90% de estadounidenses contienen resto de esta sustancia en sangre. Aunque algunos apuntan a que es por debajo de lo adecuado en cuanto a "cantidad diaria"; muchos otros difieren de estos datos y recomiendan que no haya ni un mínimo, de hecho, en Francia ya ha sido prohibido; en España por el contrario aún no se ha pronunciado el organismo de salud pública.
La AESA, este verano, publicó que la población de mayor riesgo en exposición son los niños de entre 3 a 10 años; y que, un 23% de las mujeres embarazadas expuestas al químico, pueden tener futuros bebés que padecerán algún tipo de cáncer.
La revista American Medical Association, tuvo algo que decir respecto a esto, marcando que, incluso unos niveles mínimos de exposición o de restos en el organismo, tenían un efecto negativo en nuestro organismo.
Enfermedades
Lo han relacionado con el padecimiento de cáncer de mama, de próstata,de ovario, con enfermedades como la diabetes, obesidad y la infertilidad, que tanto está dando que hablar en la sociedad últimamente con el aumento de tratamientos para la fertilidad.
Además de aumentar el riesgo de sufrir cardiopatía, enfermedades del sistema neurológico y cerebral dando lugar a trastornos del comportamiento.
Alternativas
Qué nos han propuesto para evitarlo, bien pues desde la FDA de Estados Unidos han dado una serie de pautas para cambiar la conducta diaria y el uso de los plásticos potencialmente peligrosos (aquellos con el código 3, 7 y 10):
- No reutilizar demasiado aquellos envases que dispongan de los códigos 3, 7 y 10, tanto a nivel personal, como en la industria.
- Utilización del vidrio para empaquetar alimentos y líquidos, más seguro y tiene muchas mas vidas que el plástico, así también evitaremos el uso de latas de aluminio.
- Comprar productos para niños y bebé libres de BPA, sobre todo en biberones y juguetes.
Conclusión final
Una vez más la industria ha demostrado cuanto quiere el dinero, pero qué poco quiere a la población de consumidores, aunque claro, los consumidores también se lo permitimos; Se tiene que ser más críticos con lo que represente a nuestra salud y al planeta.
Estamos hablando de la salud y calidad de vida de futuras generaciones, ¿una generación de niños enfermos?, por supuesto que no, tampoco vivir una vejez enferma o muertes prematuras por cualquier tipo de cáncer.
Una situación para pensar en serio, siempre hay que cuestionarse todo, siempre, incluso la verdad creerla a media y seguir buscando más verdades. Lo que ha dejado en claro es que tenemos que empezar a dar alarma a la sociedad y ponernos las pilas para luchar por lo que es justo, por nuestra salud. La asociación Europea ya ha dado el aviso, habrá que esperar a ver cómo se desarrollan los hechos en España.