Cuando hablamos de la muerte para todos es simple, imaginamos algún animal o persona enterrado, algún esqueleto con túnica y guadaña, etcétera, depende de qué tantas cosas hayamos visto en nuestra vida.
Pero existe un punto que a pesar de que no muchas personas han pensado, ha sido debate científico por siglos, hablamos del punto exacto donde un ser pasa de estar vivo a estar muerto.
En la antigüedad, se creía que la muerte se daba en el momento en el que los latidos del corazón y la respiración cesaban.
Actualmente sabemos que con un tratamiento adecuado esto se puede revertir, por ende, la medicina dicta que la muerte no es de un instante, sino de un proceso en el cual en algún momento se pasa del “todavía podría revivir” al “está muerto”
Suena un poco contradictorio que a pesar de que la medicina diga que la muerte es un proceso, nosotros queramos saber cuál es ese momento exacto, el paso de vivo a muerto.
Pasemos a un punto crucial, mientras que con diversos aparatos se puede mantener vivo en terapia intensiva cuando el corazón o los pulmones han fallado, ¿Qué pasa cuando el cerebro falla?
Es trabajo de los neurólogos dictar la muerte cerebral, es decir, cuando el cerebro deja de funcionar y la persona está muerta, pero sus órganos se mantienen vivos artificialmente, anteriormente se decía que si dejaba de haber actividad eléctrica en la corteza cerebral, entonces la vida había llegado a su fin, ya que la conciencia habría llegado a su fin, pero entonces recordemos cuando dormimos y automáticamente despertamos, mientras dormimos por horas, perdemos la conciencia, sin embargo continuamos con vida porque cuando despertamos la conciencia regresa, ha habido algunos casos donde gente con muerte cerebral despertó, su conciencia regresó, tal fue el caso de Gloria Cruz, una mujer australiana de 56 años de edad que en 2011, después de 2 semanas entre comillas muerta, despertó.
Por casos como este, se ha replanteado lo que significa muerte cerebral, en algunos casos, exigiendo el cese de toda actividad cerebral para confirmar la muerte.
Tal vez sólo exista una forma de saberlo, ¿saben cuál es? Así es amigos, con la misma muerte, tal vez seamos nosotros los únicos que podamos captar ese último momento en el cual pasamos de estar vivos a muertos… pero esperen un instante… no podremos
¿Por qué?
Porque literalmente, siempre estamos viviendo en el pasado, es decir, nuestra conciencia siempre está en el pasado ya que el cerebro tarda entre 150 y 300 milisegundos en ensamblar una experiencia consciente después de recibir una señal.
Imagina que chocas en tu automóvil: a los 8.5 milisegundos las bolsas de aire se activan y a los 70 milisegundos el pasajero ya salió volando si no traía cinturón de seguridad, en ese momento mueres… te faltaron de 80 a 230 milisegundos para darte cuenta de que moriste.
Existe otra teoría que es todo lo contrario, esta dicta que entre el último momento de vida y el primero de la muerte existe una eternidad.
¿Por qué? Porque debido a un fenómeno cerebral llamado dilatación temporal, la percepción de todo en el último instante de vida se modifica debido a que el cerebro se inunda del neurotransmisor glutamato y parece que el tiempo se hace eterno.
Por lo que ya metiéndonos en temas filosóficos, podrías hacer un recuerdo del recuerdo y vivir esta vida eternamente, tú verías gente morir, pero nunca aparecería el momento exacto de la muerte para ti.
Habrá que seguir investigando a ver si en un futuro ya se resolvió el misterio de ¿Cuál es el momento exacto de la muerte?