Jordi Évole, el cómico, guionista y presentador del espacio de investigación de La Sexta, 'Salvados', vuelve a estar en el ojo del huracán tras su último programa. Si el pasado mes de mayo, el catalán removió los cimientos del Gobierno con uno de sus programas más comprometidos tras analizar la "ganga" de Florentino Pérez con el Castor, poniendo sobre la mesa innumerables irregularidades que han hecho que finalmente, los ciudadanos tengan que acarrear con los gastos del proyecto, en total, 1.755 millones de euros, ahora, Évole ha puesto patas arriba la industria cárnica en España.

Salvados emitió un duro reportaje sobre la industria cárnica en España

Ocurrió en la noche de ayer, cuando se emitió el último Salvados de Évole titulado: "¿Qué hay detrás de la industria cárnica en España?", un programa donde se pudieron apreciar las pésimas condiciones en las que se encuentran los animales, no obstante, las imágenes más duras fueron grabadas en una granja de cerdos en Murcia, proveedora de el pozo. En dichas imágenes se pudo apreciar al presentador junto a un miembro de Igualdad Animal saltando las instalaciones de la granja para más tarde grabar las duras condiciones en las que se encontraban los cerdos. Enfermos, con tumores, muertos e incluso algunos vivos conviviendo junto a los muertos y enfermos.

Primeras consecuencias para Jordi Évole tras emitirse el programa de Salvados

El programa, que no tenía otra finalidad que ofrecer una realidad de lo que ocurren en numerosos lugares de nuestro país donde se crían animales, denunciando las condiciones en las que se encontraban dado que ese producto finalmente podría acabar en el supermercado, ha tenido las primeras consecuencias para el presentador de Salvados.

El Pozo desmiente que los animales entraran en la cadena de producción

Ha sido la empresa de El Pozo la encargada de desmentir a través de Twitter lo que el programa quiso dar a entender, afirmando con rotundidad que los animales enfermos de la granja de Murcia fueron sacrificados en esa misma granja y no han llegado a entrar en la cadena de producción de la empresa tal y como según ellos, el programa estaba dejando entrever.

La empresa califica el programa de Évole de "capcioso y malintencionado"

Sin embargo, la empresa ha ido más allá queriendo admitir con otro comunicado que se desvincula del contenido emitido por el programa, calificando las imágenes de Salvados de "capciosas" que distorsionan la realidad.