Comenzó mucho antes de la pasada ceremonia de los Oscar, pero fue en ella cuando se consolidó el fenómeno. Utilizar palabras como sandwich en lugar de emparedado ya era algo habitual en nuestro hablar cotidiano, pero en los últimos tiempos esta integración de términos anglosajones en el vocabulario de los jóvenes, y no tan jóvenes, es algo realmente llamativo. Y las Redes Sociales han amplificado y extendido tanto su uso que parece más difícil leer un tuit sin una palabra anglosajona metida entre los 140 caracteres de que se componen, que ver un tuit sin emoticonos, algo que, por otro lado, muchas veces se echa de menos, porque los emoticonos son bien graciosos y divertidos. Pero están perdiendo la batalla. Los emoticonos, esas caritas tan simpáticas que nos ayudan tanto a expresarnos, siempre consiguen sacarnos una sonrisa cuando las vemos. Ni siquiera la mierda con ojos, tan apreciada entre los internautas, y tan bien recibida como siempre está, tiene tanta cabida en los textos como antes.


Y es que Ellen DeGeneres y su famosa autofoto, como debería llamarse en nuestro país, ha calado muy hondo a nivel global desde que uniera a la plana mayor del cine normteamericano, ya de por sí reunida en el interior del enorme Kodak Theatre de Los Ángeles para la celebración de la última gala de los Oscar, el pasado mes de marzo, delante de la cámara de su teléfono. Una autofoto ideada por Ellen pero efectuada por Bradley Cooper, que se puso delante de todos y le cogió el móvil a la maestra de ceremonias, que recorrió en pocos minutos las redes sociales en la magrugada en que se tomó. Por la mañana siguió siendo lo más comentado de la gala (junto a la pizza que los invitados y nominados tuvieron también ocasión de comerse, pero ésta tuvo menos fuerza mediática). Fue el denominado "selfie" el que barrió hasta ser el más retuiteado de la Historia, y sigue barriendo en nuestros hábitos y nuestro lenguaje. Ahora no hay reunión, aunque sea de dos personas, que no se inmortalice con uno. Incluso a nivel individual se llegan a jugar la vida practicando "selfies" mientras están en pleno desarrollo de algún deporte de riesgo. Lo cual no deja de ser la locura más absoluta.


Sin embargo, no es solo el término "selfie" el que está ya integrado en nuestro lenguaje. Estas fotos, antaño famosas por ser las que se hacían en grupos gracias a los fotomatones, han abierto el paso a que múltiples términos anglosajones imperen en nuestro vocabulario hasta el punto de estar haciéndonos olvidar la palabra o expresión que equivale a la española en el diccionario de nuestro idioma. Vamos a repasar algunos de ellos:


-Avatar. Ya no se habla de tu foto de perfil. Ahora es tu avatar. Debido a la película del mismo título que en su día arrasó en taquilla, ese desdoblamiento de los personajes configuró un nuevo término para la mecánica de Internet: el desdoblamiento de los usuarios al utilizar su foto en un perfil o, por extensión, la foto que decidas poner para que los usuarios te identifiquen. Esta también ha pasado a llamarse Avatar. Una puesta al día de la renovación de términos que proponen las redes.


-Haters: ahora ya no se odia, se "hatea". Ahora no hay grupos de personas que odien algo, ahora son los "haters" de lo que sea. El término inglés parece más claro e intenso a la hora de expresar opiniones negativas. Las posturas intermedias ya no extisten. O te gusta algo o lo "hateas".


-Stalkear. O lo que es lo mismo: vigilar. Significa vigilar desde Internet a quien tú elijas, estando pendiente de la persona en cuestión a través de la cuenta de un amigo para que la persona vigilada no sepa que lo está. También son "stalkeadores" aquellos que se crean perfiles falsos para distintas funciones, como obtener información o generar desacreditación.


-Fungirl. No dejan de ser otra cosa que el fenómeno fan, más que nada ante la presencia de famosos que se admiran, del ámbito que sea (música, cine, series...) De esta palabra inglesa se ha creado el verbo "fungirlear", o comportarse como un fan en las circunstancias descritas.


-Trolls. En Internet son todos aquellos provocadores a partir de mensajes escritos específicamente para ello. En redes sociales o chats son personas que se incorporan a la conversación para generar malestar o provocar reacciones contrarias a las que en ese momento se están teniendo respecto a lo que se comente. Pueden incluso llegar a poner en contra a los iniciales conversadores del tema a debatir.


-Fake. Su traducción al castellano sería "Falso". Un fake viene a ser algo manipulado en la red. Una Foto, una cuenta de usuario, una opinión... Suele ser bastante fácil detectarla porque el resultado es demasiado extremo, pero no deja de llamar la atención que se utilice el témino "fake" frente al español "falso" cuando es su traducción literal y una palabra tan sencilla de aplicar.


Estos y otros que seguramente me dejo en el tintero son muestras del terreno que los términos anglosajones están comiendo a los españoles. ¿Son una moda? ¿Quedarán instalados en nuestro lenguaje para siempre? Eso solo el tiempo lo podrá decir.