Los que se atreven a emprender, puede que nazcan con algunas cualidades y capacidades en su interior y personalidad que los ayuden, pero esto no lo es todo, el perfil de un emprendedor se reafirma a través de la unión de algunas experiencias de vida, actitudes, necesidades y ganas.
Sin embargo, ¿qué hace la diferencia para que algunas personas o en este caso emprendedores se atrevan a arriesgar?, ¿a ver oportunidades en donde nadie más las vio?
¿a qué le apuesten por un negocio propio y no uno en el que tengan que producir ganancias a otro?
¿Qué es ser emprendedor?
Ser emprendedor es una mezcla de lo que somos y lo que queremos llegar a ser, por ende, podemos afirmar que es una mezcla de los dos, ya que nace y al mismo tiempo se hace, y el éxito, es el resultado de la unión de todo esto, aclarando de que es más fácil llegar a serlo si es lo que queremos para nuestro proyecto de vida y lo que buscamos para nuestro futuro.
¿Qué necesitamos para ser Emprendedores?
Hay que tener en cuenta varios aspectos que nos definen como emprendedores y tenerlos presentes para lograr nuestros objetivos, uno de ellos es la disponibilidad, ya que toda idea que surge en nuestra mente, todo proyecto que nos pensemos requiere más que de dinero, de tiempo, así es en como pondremos en marchas nuestros objetivos y estaremos más cerca de lograrlos.
Otro de los aspectos importantes es el tener autonomía, pues seremos nuestros mismos jefes y debemos estar en la capacidad de ser responsables y cumplir claramente con los deberes que demande nuestro proyecto, más adelante aparece la animosidad, esa que será necesaria para afrontar los reveses que se presenten en algún momento.
Por ultimo pero no menos importante, son claves el liderazgo y la objetividad, el primero es una cualidad con la que en la mayoría de los casos se nace, con éste el emprendedor tiene la capacidad de hacer que otros se enamoren de su proyecto, implicarlos en él, pues necesitaremos de otros a nuestro lado y el segundo será base fundamental para mantener un panorama totalmente claro, pues hay que saber valorar las situaciones con realismo y jamás llegar a ser impulsivos en donde tomemos decisiones sin sentido.
Ahora ya lo sabe, si tiene ese impulso de tener su propio negocio, y tenía la duda si estaba en las capacidades de lograrlo, ya hemos resuelto esa incógnita, pues debe aprovechar esas cualidades con las que nació, pero debe aprender y pulir esos pequeños detalles que hacen la diferencia, sea feliz y recuerde que entre más rápido se enfrente a sus miedos, estos más rápido dejaran de perseguirle.