La aparición de la Internet en nuestras vidas, ha reconfigurado la forma en como percibimos el mundo exterior. El navegar por horas por la simple curiosidad y entretenimiento, nos deja un cumulo de información dudosa, sorprendente y muchas veces visceral.
Podemos encontrar imágenes que relatan parte de la historia de la humanidad, a la cual tenemos acceso rápido y en cuestión de segundos podemos encontrar todo lo que estábamos buscando y aún más. Muchas personas ya no se dedican a buscar información en fuentes físicas, acuden sin dudarlo al buscador para empoderar una herramienta, que quizá espía todos y cada uno de nuestros movimientos.
Y aun con todas las advertencias, no caemos en una histeria colectiva cuando vemos casos donde nuestros datos se ven expuestos, donde nuestra privacidad es nula. Las redes sociales, prácticamente tienen en consideración como nos gusta el café, con dos de mascabado y una pizca enorme de irresponsabilidad por parte del usuario. ¿Cómo diablos nos cedemos a la presión del medio social?
Manifestando abusos en Facebook
Facebook, simplemente no se puede alejar de la marea de desgracias. Muchos datos han salido a la luz, sobre una serie de abusos que todos los días son publicados a diestra y siniestra. Si, algunos de nosotros sabemos que hay publicaciones realmente violentas en la red social, pero no caemos en la cuenta, que esta situación va en aumento.
La reciente información expuesta, refiere declaraciones de odio, y aunque hay un poco más de control, estas publicaciones continúan manifestándose como un tipo de propaganda.
Muchas personas que han colgado en su red social, imágenes de la injusticia social que viven en su país cada día, son amonestadas por la red social, ya que el contenido que suben, se considera inadecuado.
Sin embargo Facebook no detiene prontamente esta cantidad de publicaciones, que expone como el abuso se sigue arraigando, y los administradores simplemente no hacen nada para eliminarlo y poner un alto a esta marcha progresiva de antipatía.
Decepciones con forma de un “no me gusta”
Facebook ha seleccionado los contenidos más importantes que cumplen una acción de violencia en la red: Cuentas falsas, Spam, Incitación al Odios, Violencia Gráfica, y desnudez de adultos, así como contenido sexual.
La red social tras un análisis, expone que entre 3% y el 4% de los usuarios que aparecen activos, son en relación de cuentas falsas.
Por lo que Facebook ha eliminado 583 millones de cuentas ficticias. El sistema funciona y mucha de la violencia gráfica se suprime en un 86%. Desgraciadamente Mark Zuckerberg tendrá que poner cartas sobre el asunto, para que esta epidemia de violencia visual no se dispare y siga afectando este canal de información que muchos de nosotros preferimos encima de otros.
