Desde el pasado 25 de noviembre le perdieron el rastro a Roberta Cortesi, una italiana que llevaba dos años en Málaga. La mujer de 36 años se conectó por última vez al WhatsApp hace dos semanas. Luca Gambirasio, abogado de la familia de la desaparecida, dijo que sus clientes se encuentran muy afectados y que se "teme lo peor" porque ella tenía una relación que no era “nada positiva” con un hombre.

La mujer envió un WhatsApp a su familia antes de que el móvil se desconectase

El pasado 25 de noviembre, Roberta Cortesi envió un último WhatsApp a su familia sobre las 12:20. A partir de ese momento, sus seres queridos no han vuelto a tener noticias sobre ella. La mujer le había prometido a su madre que iba a hablarle en la tarde, pero la llamada no se produjo y el teléfono se apagó. Por eso, el 30 de noviembre la familia en Italia interpuso una denuncia ante los Carabinieri.

Acto seguido, la denuncia fue enviada al Ministerio de Asuntos Exteriores y al consulado italiano en Málaga. Según ha trascendido, los jefes de la mujer y los dueños del lugar donde vivía llevaban varios días sin verla.

La dueña de la estancia comentó que había escuchado la voz de una mujer a través de la puerta del cuarto, pero aclaró que no sabía si se trataba de la desaparecida o de otra persona. Ahora la familia de Roberta Cortesi y el representante legal quieren que las autoridades españolas investiguen a la última pareja de la italiana.

El medio de comunicación El Español informó que la mujer había sido víctima de violencia de género, aunque todavía no han podido averiguar si la desaparecida denunció al individuo al que se refería la familia o a una pareja anterior.

El letrado de la familia habló de una pista falsa

Luca Gambirasio dijo que la familia italiana habría recibido una llamada desde un restaurante en España en el que una persona les informaba que había encontrado el móvil de la desaparecida.

Sin embargo, el entorno de la mujer llegó a la conclusión que se trataba de una pista falsa. La Policía Nacional abrió una investigación para esclarecer los hechos, aunque no han dado detalles de sus labores.

Los efectos personales de Roberta Cortesi han desaparecido

El abogado Luca Gambirasio dijo que los efectos personales de la italiana habían desaparecido del lugar en el que se encontraba alojada, pero el alquiler había sido pagado. Por eso, el letrado remarcó que había una posible maniobra para “desviar” las pesquisas.

El letrado comentó que estaba en contacto con las autoridades españolas y los agentes de la Policía de Bérgamo, la ciudad italiana de donde es originaria la familia de la mujer.

Cabe destacar que Roberta Cortesi, licenciada en Literatura, trabajaba como camarera en Málaga. Sin embargo, la desaparecida soñaba con trabajar en el sector turismo, ya que dominaba el español y el inglés, además de su idioma nativo, el italiano.