Según la calificación fiscal provisional realizada mediante el atestado de la Guardia Civil del parricidio de Sueca (Valencia), el procesado presuntamente dejó que su hijo hablase telefónicamente con su madre para que escuchara lo que estaba ocurriendo en la vivienda. En el escrito del fiscal afirmaron que sobre las 14:04 del 3 de abril de 2022, el menor le envió un mensaje a su progenitora en el que le preguntaba si podía ir a buscarlo.

El padre del niño no quiso detallar la discusión que tuvo con su hijo

Durante su comparecencia en sede judicial, el procesado no quiso detallar la discusión que tuvo con su hijo, algo que habría provocado el primer mensaje de Jordi a su madre.

Según ha trascendido, el hombre presuntamente cogió dos cuchillos y dirigiéndose al niño de 11 años lo amenazó de muerte. Aunque el presunto autor sí reconoció que el pequeño le suplicó que no le hiciera nada y que le habría confesado que no iba a decirle nada a su madre.

Sin embargo, el Ministerio Público afirmó que el individuo hizo caso omiso a las súplicas del niño y comenzó a atacarlo a cuchilladas. Cuando la mujer se percató de que algo estaba ocurriendo en la casa de su expareja, rápidamente cogió su coche y volvió de Cullera a Sueca. En el camino, la madre comenzó a llamar a su hijo.

Durante las 14:14 el hombre ya había comenzado el ataque contra su propio hijo e incluso se había dado cuenta de las llamadas de la mujer.

Por eso, el procesado dejó que el menor hablase con su madre para que le pidiera ayuda. El pequeño solo pudo decirle con un grito desesperado: “Mamá”. Acto seguido, el teléfono se apagó.

La mujer llamó a su exsuegra para informarle lo que estaba pasando

Tras la llamada de Jordi, la mujer llamó a su exsuegra para pedirle que acudiera a la casa de su hijo en Sueca porque algo le estaba pasando al niño.

Sin embargo, el presunto autor de los hechos no respondió a los gritos de ambas cuando llegaron a la vivienda. Minutos después, agentes de la Guardia Civil forzaron la puerta e irrumpieron en el domicilio.

Cuando los agentes accedieron a la vivienda encontraron el cuerpo sin vida de Jordi. Los uniformados también se dieron cuenta de que el presunto autor de los hechos estaba impasible.

Ahora la fiscal explicó que el menor sufrió 24 cuchilladas, la mayoría en el cuello, menos tres.

Cabe destacar que el niño estaba en la casa de su padre para celebrar su cumpleaños. La fiscal explicó que el hombre presuntamente insistió a su expareja para que le llevara el niño ese 3 de abril. La madre accedió a llevar al menor al domicilio porque no sospechaba nada de las intenciones de su expareja. Un año antes la mujer y su hijo habían tenido que huir de la vivienda de Sueca después que el procesado la amenazó con un cuchillo cuando ella le comunicó que había decidido separarse de él.

El niño intentó parar la agresión de su padre

Algunas heridas del pequeño atestiguan que intentó frenar la agresión, pero la complexión del hombre y la diferencia de edad entre los dos era notable.

Incluso la hoja del cuchillo se partió y habría sido encontrada durante la autopsia. Tras su detención, el presunto autor de los hechos afirmó que nada de esto hubiera pasado si su exmujer hubiera vuelto a su lado.