El Seprona, sección perteneciente a la Guardia Civil, ha detenido a una persona e investiga a otras tres por presuntamente llevar a cabo prácticas quirúrgicas Animales en un núcleo zoológico de la provincia de Cáceres, entre otros delitos. En un primer momento, los agentes estaban comprobando si el recinto cumplía con la normativa, pero cuando prosiguieron con la inspección se dieron cuenta de varias irregularidades. Ahora mismo el caso está en manos del Juzgado de Instrucción.

Agentes del Seprona detectan varias irregularidades en un supuesto núcleo zoológico

Los hechos han tenido lugar muy cerca de la ciudad de Cáceres. Agentes del Seprona estaban llevando a cabo una inspección dentro de un supuesto núcleo zoológico, donde se encontraron con 109 perros que estarían destinados para cazar.

En esta misma inspección se buscaba comprobar si los animales estaban en regla y si tenían la pertinente identificación electrónica. Sin embargo, los agentes se percataron de que existían varias irregularidades y, sobre todo, que a prácticamente todos los perros que allí había se les había seccionado algunas partes del cuerpo.

La mayoría de los animales que se encontraban en el lugar tenían cortadas las orejas o el rabo

107 perros de este supuesto núcleo zoológico de la provincia de Cáceres presentaban caudectomías (cortes del rabo) y otectomías (sección de las orejas). Hay que tener en cuenta que desde hace tres años estas prácticas están terminantemente prohibidas por la Unión Europea.

De todos los animales afectados presuntamente por estas técnicas ilegales, 69 de ellos habían sido objeto de ambas operaciones, mientras que otros 38 se habían quedado sin cola.

Hay un detenido y tres personas investigadas, ya que el corte de orejas y rabo en perro es ilegal

Asimismo, durante la inspección también se hallaron irregularidades cuando estaban comprobando si los animales tenían los papeles en regla o se habían llevado a cabo los tratamientos médicos correspondientes a los animales.

Además los agentes del Seprona se dieron cuenta que una de las personas que se encontraban en el supuesto núcleo zoológico estaba cometiendo un quebrantamiento de condena, ya que tenía prohibido el acceso a animales y ejercer cualquier oficio con ellos.

Por ello, se procedió a detener al presunto responsable del lugar al que se le acusan de delitos como falsedad documental y maltrato animal. Además, tres personas continúan siendo investigadas. Los hechos han sido remitidos al Juzgado de Instrucción tras el operativo iniciado por la sección de la Guardia Civil dedicada a la protección de animales y de la Naturaleza.