Todo fue una invención. La presunta víctima de una agresión homófoba en el barrio madrileño de Malasaña nunca fue atacado por ocho encapuchados a plena luz del día ni le marcaron a navajazos en el glúteo un insulto homófobo. Tras un largo interrogatorio por las sospechas de los investigadores, el denunciante reconoció que, en realidad, esas marcas fueron consentidas y realizadas por dos personas en una vivienda. A continuación, reconoció que todo respondía a una estrategia para ocultar una infidelidad a su pareja con otras personas.
La falsa víctima de la agresión homófoba habló ante las cámaras: 'quiero que me trague la tierra y ya'
La versión sobre la presunta víctima de una agresión homófoba en Madrid saltaba por los aires durante la tarde del pasado miércoles. El denunciante se retractaba de su denuncia y admitía que se lo había inventado todo. Gracias a la intervención de un agente que se ganó la confianza de la falsa víctima, este modificó por escrito su denuncia. De este modo, todo había sido mentira. Sin embargo, un equipo de 'Cuatro al Día' se encontró al propio denunciante en la calle, del que pudieron obtener algunas declaraciones.
La falsa víctima de la agresión homófoba de Madrid aseguraba a la reportera del programa que se encontraba "muy mal" y que quería irse con su familia.
"Solo quiero que me trague la tierra y ya", aseguraba el denunciante ante las cámaras. Después aseguraba que la prensa se estaba inventando cosas, mientras continuaba afirmando que se encontraba "fatal".
El denunciante se habría inventado todo con el objetivo de ocultar una infidelidad a su pareja
Según los investigadores, que desde un primer momento se dieron cuenta de detalles que no cuadraban, no buscaban a las personas que le habrían hecho las marcas a navajazos en el glúteo al denunciante.
Este reconoció en su segunda versión que todo se había producido para ocultar una infidelidad a su actual pareja con varias personas. No obstante, se estudia cuál puede ser la próxima decisión a tomar tras la denuncia falsa del joven de 20 años.
El joven podría haber incurrido en una simulación de delito: depende de si ya hay una causa penal
El denunciante tendría 72 horas para retractarse en sede policial de su testimonio. Hay que tener en cuenta la falsa víctima podría enfrentarse a un delito de falsa denuncia, penado entre seis meses y dos años de cárcel, aunque en este caso no identificó a nadie concreto en su denuncia. Por otro lado, también podría haber presuntamente incurrido en una simulación de delito. La clave para esto se encuentra en si el caso se encuentra ya judicializado y si existe, por tanto, una causa penal abierta.
