Dos agentes de la Policía Nacional salvaron la vida de un bebé de 13 meses que se encontraba jugando en un parque de Alcobendas, municipio a 15 kilómetros al norte de Madrid. Alertados por la sala del Centro Inteligente de Mando, Comunicación y Control (CIMAC), los agentes en servicio se movilizaron hacia la localidad de la emergencia, donde se encontraron con un bebé que no podía respirar, en brazos de un hombre.

El niño tampoco se movía ni respondía a ningún estímulo.

El policía salvó al bebé de un ahogamiento

Rápidamente, uno de los agentes tomó al niño y comprobó que no podía respirar, por lo que comenzó a hacerle ‘maniobras de Heimlich’, hasta que el bebé expulsó unas flemas y comenzó a llorar y respirar dificultosamente de nuevo, superando así el cuadro crítico y una asfixia segura.

La madre fue quien dio aviso a la policía al ver lo que estaba ocurriendo con el niño. Según relató a los agentes, estaba jugando normalmente cuando la Mujer se percató de que algo no estaba bien: al acercarse, vio a su hijo pálido y quieto, sin poder respirar.

Entonces, decidió pedir ayuda.

Luego de las maniobras que sacaron al niño de la peligrosa situación, llegó personal del Servicio de Urgencia Médica de la Comunidad de Madrid (SUMMA 112) y derivaron al niño al hospital Infanta Sofía de la localidad de San Sebastián de los Reyes.

La ‘maniobra de Heimlich’ salva vidas

Es importante estar atento con los Niños, más proclives a que un cuerpo extraño entre en las vías respiratorias, bloqueando el flujo de aire y creando una situación de crisis. Y es necesario entender de inmediato lo que está sucediendo para reaccionar, tratando de resolver la función respiratoria y permitir que la persona vuelva a la normalidad. Por esta razón es importante conocer la ‘maniobra de Heimlich’, que debe hacerse de manera diferente según la edad.

La ‘maniobra de Heimlich’ es una técnica de primeros auxilios que en los cuerpos policiales y de rescate se practica y ensaya constantemente. También, según los pediatras, es muy recomendable que los padres la conozcan. Se trata de tres pasos de compresión abdominal con el objetivo de que el objeto atorado en las vías respiratorias sea expulsado.

El policía ya había salvado a otro niño en abril

Para hacer la maniobra en un bebé, es necesario ponerlo boca abajo, sosteniendo sus hombros y cabeza con un brazo, mientras se le dan cinco palmadas rápidas entre los omóplatos. Si no se consigue la reacción deseada, se pone boca arriba y se lo sujeta firmemente con un brazo, mientras con la mano, dos centímetros bajo el esternón se hacen, también, cinco presiones.

Esta maniobra debe repetirse las veces que sean necesarias hasta la reacción del niño. Desde la Policía Nacional informaron que el agente que realizó la ‘maniobra de Heimlich’ y salvó la vida del bebé, meses atrás ya había, con el mismo método, había rescatado a otro niño estando fuera de servicio el pasado mes de abril.