Un hallazgo escalofriante se ha producido en la zona de búsqueda de Tomás Gimeno: dos botellas de oxígeno puro que abonan la teoría de que se ha quitado la vida, pero agregando una nueva tesis. El padre de Olivia y Anna podría haberlas utilizado para provocarse lo que se llama “muerte dulce”.

‘Muerte dulce’: la tesis de los investigadores

El buque oceanográfico Ángeles Alvariño encontró dos botellas de oxígeno de particulares características. Se trata de envases pequeños, de tan solo medio litro de capacidad que se utilizan en situaciones de emergencia, para obtener algunos minutos de autonomía.

Las botellas de aluminio tienen una boquilla que permite respirar y son utilizadas usualmente por pilotos de la fuerza aérea cuando caen al mar.

La Guardia Civil ya habría confirmado que las botellas de oxígeno pertenecen a Tomás Gimeno constatando sus números de serie que llevan a la tienda donde fueron adquiridas. Estos detalles abonan aún más la tesis de los investigadores sobre que el padre de las niñas habría decidido, y conseguido, quitarse la vida de una manera absolutamente planificada: tirarse al agua con un cinturón de plomos y esas dos botellas que permiten respirar oxígeno puro por un corto tiempo y así llegar a los que se denomina “muerte dulce”.

Buscan un cinturón de plomos usado por Gimeno en submarinismo

Los investigadores todavía están buscando ese cinturón de plomos, un instrumento habitual en la práctica de submarinismo para compensar el peso específico del cuerpo en el agua y evitar que salga a flote. Tomás Gimeno practicaba submarinismo y conocía al dedillo cómo manejar estos elementos.

El delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana, no pierde las esperanzas de encontrar “algo más” con respecto a Anna y Tomás Gimeno y las tareas que realiza el buque oceanográfico, que en este momento se encuentra en parada técnica a causa del mal tiempo y el estado del mar.

Un escalofriante puzzle

Para el delegado, sería “extraordinario” encontrar algo más porque “ya era difícil encontrar indicios y se encontró a Olivia”.

Por ello, no se puede hablar de “posibilidades”. Pestana también informó que la Guardia Civil se encuentra analizando el reemplazo del Angeles Alvariño por otro tipo de instrumento de exploración de acuerdo a las posibilidades económicas públicas. El buque oceanográfico debería reincorporarse a sus tareas habituales y por el tipo de búsqueda sería necesario un submarino para descender a los 1.000 o 1.500 metros.

La prolija búsqueda y el compromiso de la tripulación son los que han permitido encontrar a Olivia Gimeno y sumar piezas a este espeluznante puzzle de Violencia de género que organizó Tomás Gimeno para matar a sus pequeñas hijas y, supuestamente, terminar con su vida también.