Cada jornada que pasa sin saber nada sobre Tomás Gimeno hace que las posibilidades de hallar su cuerpo y el de Anna sean más remotas. Mientras que el buque Ángeles Alvariño rastrea otras zonas del fondo marino en busca de los dos desaparecidos que quedan, en tierra también prosiguen las investigaciones para determinar cuáles fueron las intenciones del padre de las niñas de Tenerife. En este caso, se ha procedido a registrar nuevamente el domicilio del autor del asesinato de Anna y Olivia. Sin embargo, los resultados del registro han desconcertado más a los investigadores.

Los investigadores registran de nuevo la casa de Tomás Gimeno, en esta ocasión sin éxito

Se ha podido saber que la Guardia Civil ha regresado de nuevo a la vivienda de Tomás Gimeno para realizar otra inspección en busca de pistas que arrojen luz sobre su paradero. Hay que tener en cuenta que las autoridades a cargo de la investigación continúan trabajando con la hipótesis de que Anna y Olivia fueron sedadas o asesinadas a través de medicamentos que provocaran un colapso o una sobredosis en las pequeñas.

Por ello, han recorrido palmo a palmo la propiedad del padre de las niñas de Tenerife con el objetivo de hallar alguna sustancia relacionada con el caso. No obstante, no habrían encontrado nada sospechoso y, por ende, ningún sedante o calmante.

Se buscaba algún sedante o calmante con el que presuntamente quitó la vida a Anna y Olivia

Se trata del sexto registro que la Guardia Civil lleva a cabo en la propiedad que Tomás Gimeno tiene en Igueste de Candelaria. Sin embargo, al no hallar ninguna sustancia, el desconcierto continúa al no saber dónde puede estar el asesino de Anna y Olivia, si bien la idea más extendida es que se quitó la vida lastrándose hasta el fondo del océano.

También debe estar presente que los resultados de la causa de la muerte de Olivia apuntan a un edema pulmonar agudo, que bien pudo ser provocado por una asfixia o producto de la inhalación de una sustancia tóxica. De ahí que se haya decidido explorar detenidamente otra vez la casa, aunque sin grandes avances.

El buque Ángeles Alvariño rastrea otra zona en busca de los desaparecidos

Mientras tanto, en el océano continúan los rastreos del buque Ángeles Alvariño. Se ha podido saber que han cambiado la zona de búsqueda, ya que también se trabaja con la hipótesis de que Tomás Gimeno pudo deshacerse de su teléfono móvil en la zona donde se perdió su señal, pero seguir navegando hasta otro punto donde presumiblemente pudo acabar con su vida. Todas las líneas de trabajo, por tanto, continúan abiertas y mientras los días avanzan el desconcierto sobre si finalmente se encontrará a Anna y el padre de las niñas aumenta.