En Pakistán suceden acontecimientos que no dejan de ser curiosos a los ojos del resto del mundo. Ocurre en cualquier ámbito de discusión del país, ya sea por el coronavirus, por las vacunas o por algún acto vandálico que en otros países pasaría desapercibido.

En este caso, más que un delito, se trata de un abuso de poder por una de las instituciones del país. Eso ha hecho que cometieran una acción impropia y que queda fuera de sus deberes, además de crear debate entre los pakistaníes sobre si habría que cambiar algo en la legislación para evitar situaciones incómodas.

En España también encontramos variopintas situaciones con la policía, como recomendar un pantalón más largo a una tiktoker.

Los policías de Pakistán detuvieron a los trabajadores y vaciaron el local

Una sucursal de la cadena Johnny & Jugnu ha sido la protagonista del suceso ocurrido en la ciudad de Lahore. Y es que la policía pakistaní ha arrestado a trabajadores del local de comida rápida por no darles hamburguesas gratis. Un comunicado de la propia cadena en redes sociales explicaría lo sucedido dos días antes del arresto: "Tras rechazar su petición de hamburguesas gratis, algo que es habitual para los policías, éstos amenazaron a nuestros gerentes y se marcharon. Al día siguiente volvieron para presionar a nuestro equipo y amenazarlo".

Fue el 11 de junio cuando, según redacta la empresa, "unos agentes volvieron y se llevaron a nuestro gerente sin dar motivo alguno, vaciaron todo el local y arrestaron al personal de cocina. NI siquiera dejaron apagar las planchas y las freidoras, dejando a los clientes sin su pedido".

Los agentes de Policía, despedidos por arrestar a 19 trabajadores

Después de ocurrir este hecho tan embarazoso, ya advirtió un alto mando policial de Pakistán bajo el nombre de Inam Ghani, que esto no quedaría impune: "Nadie puede saltarse la ley. No se tolerarán las injusticias. Todos ellos serán castigados", ha afirmado.

Dicho y hecho.

Los agentes involucrados en esta polémica han sido suspendidos y despedidos de su puesto de manera inmediata. No es una cantidad menor, ya que fueron hasta nueve los policías que pidieron las hamburguesas gratis, increparon al personal del negocio y arrestaron a 19 trabajadores del lugar.

El primer ministro de Pakistán solicita una reforma de las fuerzas policiales

La cosa parece no quedar ahí, ya que esto puede servir de precedente para próximas situaciones donde la policía exceda sus límites legales. De esta manera, el primer ministro de Pakistán, Imran Khan, ha solicitado una reforma de las fuerzas policiales de la provincia, aludiendo incluso a que varios políticos han hecho designar a cómplices para controlar las comisarías.

No es la primera vez que pasa algo así en la ciudad de Lahore, una de las más grandes y pobladas de Pakistán. Suelen ser típicos los casos de corrupción en el cuerpo policial, como cobros excesivos a la población civil, sobornos de empresarios y muchos otros casos.