Casi diez días más tarde, el caso de las niñas desaparecidas de Tenerife sigue abierto y en labor para poder encontrarlas; no obstante, las pistas halladas aún no han conseguido desvelar la verdad. Anna y Olivia Gimeno, de 1 y 6 años, desaparecieron con su padre sin dejar rastros, pero, al día de hoy, aunque todavía no se sabe su paradero ni el estado en el que se encuentran, se han descubierto nuevas evidencias. Asimismo, la pareja de Beatriz Zimmerman, madre de las menores, sostiene, con culpa, que todo esto no habría pasado si él no hubiese estado en una relación con la ex del sospechoso.
La pareja de Beatriz se siente culpable
Se conoce que Beatriz Zimmerman se había separado de Tomás Gimeno y había vuelto a conformar su familia junto a un hombre mayor que ella y, como un amigo de Tomás declaró, él no soportaba la idea de que tuviera otra pareja. Pese a ello y a todo lo ocurrido en el caso, había asegurado de que no era capaz de hacer daño a nadie. Teniendo en cuenta los celos de Tomás por la pareja de Beatriz, la nueva figura paterna de Anna y Olivia había confesado que se sentía muy culpable por todo lo que había pasado: "Si yo no hubiera estado, esto no habría pasado", se lamentó.
Ahora, el amigo de Tomás, declara que ya no está seguro de quién es realmente esta persona y que, al parecer, tiene "dos caras".
Además de ello, dijo en una entrevista que el sospechoso de la desaparición de las menores era muy inteligente y lo suficientemente capaz como para haber elaborado un plan de escape e, incluso, preparar una escena falsa, pero tan perfecta como para confundir a los investigadores del caso.
El secuestrador fue el padre y tenía un plan de fuga
El pasado martes 27 de abril, Tomás Gimeno recogió a sus dos hijas, Anna y Olivia, de la casa de su expareja; sin embargo, antes de desaparecer con ellas, llamó a la madre de sus hijas, Beatriz Zimmerman, para decirle que nunca más vería a las niñas. Esa día, fue visto en el puerto deportivo de Santa Cruz de Tenerife abordando una embarcación con unos bultos y maletas con ropa, pero las niñas no estaban.
Se fue en la lancha y regresó en poco tiempo para comprar un cargador de móvil y luego volvió a irse, pero, esta vez, para ya no aparecer.
Tomás fue grabado por las cámaras del puerto, pero en ningún momento hubo rastro alguno de las menores secuestradas. Asimismo, debido a la reconstrucción de los últimos pasos de Tomás por parte de la Guardia Civil, se sabe que el padre de las niñas había preparado un plan de fuga. Es por ello, dicen las autoridades, que el dispositivo móvil de Tomás podría ser una pieza esencial para descubrir su recorrido.
Se hacen descubrimientos por medio del móvil y la sangre en la embarcación no es de las niñas
La reconstrucción de los hechos realizada por las autoridades han desvelado algunos de los pasos que dio el padre de las menores antes de zarpar.
El 27 de abril, Tomás llevó a sus hijas donde sus padres a las 19:30 hs. y, 25 minutos después, estuvo en su casa. Sin embargo, a las 21:00 hs. llegó la madre para recogerlas y ya no estaban, por lo que los tres desaparecidos habrían estado en la casa una hora como máximo.
Media hora después, Tomás ya estaba en el pantalán, pero eso está a solo 20 minutos de distancia desde su hogar, por lo que aún no se sabe qué hizo en esos 10 minutos sobrantes, pesquisa que podría ser clave para las investigaciones del caso. Después de ello, las cámaras de seguridad lo captaron subiendo a la embarcación con los bultos y la maleta. También cargó un portabebé, porque más tarde fue encontrado flotando en el mar.
🔴#URGENTE | La madre de las niñas desaparecidas en #Tenerife nos pide que por favor difundamos este vídeo.
Para aportar cualquier dato contactar urgentemente con las autoridades.
👉📞 #091 #062 #112
La familia agradece y pide difusión. 🙏🏻 pic.twitter.com/rxEN1wEuU6
— AUGC Guardia Civil (@AUGC_Comunica) May 4, 2021
Gracias a las investigaciones del móvil de Tomás, se dio pie para sospechar que podrían estar en el sur de la isla, pero la señal del móvil no funcionó por un tiempo cuando se encontraba en un lugar de dicha zona, por lo que no se sabe qué ocurrió en ese momento. Por otro lado, en cuanto a los restos de sangre que se encontraron en la embarcación —la cual fue hallada a la deriva— y se temía que fuera de las niñas, se determinó que, en realidad, era de Tomás, conclusión que logró el Laboratorio de Criminalística tras su respectivo análisis.
Por último, al ver que, hasta el día de hoy, las investigaciones policiales no han logrado recuperar a sus hijas ni descifrar el estado en el que se encuentran, Beatriz Zimmerman ha pedido que se difunda en las redes sociales un vídeo de sus hijas por si alguien logra reconocerlas. Beatriz aún no pierde la esperanza de que sus hijas puedan ser halladas pronto y con vida.