Durante la protesta del 8M llevada a cabo en Barcelona, un hombre atacó a varias manifestantes con gas pimienta. El suceso ocurrió a las 20.00 h, en el Paseo de Gracia de Barcelona, cuando un hombre ingresó en uno de los espacios no mixtos de la convocatoria (eran ocho tramos en total, dos de ellos mixtos) por lo que se le informó de que debía retirarse de allí a través de un megáfono, pero no lo hizo. Cuando se le volvió a pedir que se fuera, el hombre sacó un spray de gas pimienta y atacó a varias manifestantes.
En total, cinco mujeres fueron afectadas por el spray y el hombre fue retenido por la Guardia Urbana de la capital catalana, y si bien no se encuentra detenido, está bajo investigación por cometer un delito leve de lesiones.
Por su parte, las víctimas fueron atendidas por el Servei d'Emergències Mèdiques (SEM) y presentaron su correspondiente denuncia. Hasta ahora se desconoce la identidad del sujeto.
La concentración transcurrió sin más inconvenientes
A pesar del altercado, la marcha transcurrió con normalidad. En total participaron unas 4.500 personas, en su mayoría mujeres de diferentes edades, familias y varios hombres en los tramos mixtos. Durante la protesta hubo baile, música y teatro espontáneo, y aunque se veló por el mantenimiento de la distancia social debido a la afluencia de personas esto fue muy difícil; sin embargo, el uso del tapabocas fue generalizado.
Para evitar las aglomeraciones, Vaga Feminista, quien organizó el acto principal convocó una concentración estática donde los participantes fueron distribuidos en 8 diferentes tramos, cada uno con un número máximo de 450 personas para evitar aglomeraciones.
Además de esta concentración, el sindicato de estudiantes de Cataluña convocó una huelga estudiantil y se llevaron a cabo medio centenar de actos de todo tipo se han en diversas localidades de Cataluña para reivindicar la igualdad de género.
El 8M a pesar del COVID
Si bien en muchas partes se prohibieron los actos del 8M debido a la pandemia por el coronavirus y evitar su propagación, no solo se manifestaron en Catalunya.
En Castilla y León hubo varios actos, alrededor de una veintena que concluyeron varias concentraciones en provincias “seguras” cumpliendo con los protocolos sanitarios.
En Valladolid, la Coordinadora de Mujeres 8M para asegurarse de cumplir las medidas durante la concentración, se pintaron señales en el suelo con una distancia de dos metros para que los participantes del acto se ubicaran.
En Salamanca y la Ciudad de León se llevaron actos similares.
En Austrias, en las ciudades de Oviedo, Gijón y Avilés se concentraron para protestar contra la criminalización del colectivo feminista. Por su parte, en Valencia las protestas se llevaron a cabo en los balcones que se llenaron de tonos morados y aplausos para revindicar la lucha feminista.
