En los tiempos actuales se han realizado infinidad de movimientos y campañas para detener el maltrato en el hogar y la Violencia de género, pero lamentablemente aún falta mucho camino por recorrer. El lunes 8 de febrero un niño de 13 años llamó a emergencias para denunciar que su madre estaba siendo atacada por su padre. Durante la denuncia, el trabajador del 112 logró escuchar gritos, los cuales posteriormente fueron confirmados que provenían de la Mujer.
Con solo 13 años, un niño consigue proteger a su madre, quien estaba siendo atacada en su domicilio
El suceso ocurrió el lunes alrededor de las 7:00 p.m., cuando el padre de la familia arremetió contra su mujer y madre del menor. La terrible situación se desencadenó en el domicilio de la familia, que se encuentra en el barrio El Restón de Valdemoro, en Madrid. Esta información y todo lo que se conoce del caso ha sido gracias al Jefe de Policía Local del municipio, Alberto Albacete.
Según la investigación policial, dentro del hogar comenzó una gran discusión entre la pareja, la cual se fue agravando hasta terminar con el padre presuntamente golpeando a su mujer. El hijo, de 13 años, se percató de la agresión física que sufría su madre en ese momento, así que llamó rápidamente al 112 para explicar el problema y conseguir ayuda lo antes posible.
El recepcionista que atendió la llamada fue capaz de escuchar gritos femeninos
Alberto Albacete, el Jefe de la Policía, ha sido quien comentó la situación tan preocupante que vivió el recepcionista, que escuchó los gritos de la llamada. Por estas razones, casi de inmediato fue enviada una dotación de la policía, con la intención de intervenir en dicha escena y ayudar a los afectados.
Una vez logró aclararse la situación, la policía procedió a detener al padre, quien aún se encontraba dentro de la residencia. Finalmente, la madre también necesitó abandonar el hogar, siendo trasladada a un hospital cercano, el Infanta Elena de Valdemoro.
Alberto, como Jefe de Policía en Valdemoro, afirmó que ha presenciado varias veces denuncias por agresión y violencia de género, pero que esta clase de casos poseen una particularidad que los hace aún peores, ya que los menores también son víctimas.
El jefe de policía también comentó que estas “Son víctimas a las que nadie nunca nombra, a veces no sabemos qué hacer con el menor, la madre va al hospital, el padre al calabozo, pero ¿qué hacemos con el menor?”. También quiso comentar la suerte de que el menor, en este caso, conociera el funcionamiento básico de los servicios de emergencia, ya que la situación pudo haber llegado a empeorar si el niño no hubiera sabido utilizar el 112.