Un hombre de 47 años que respondía al nombre de Florentino López Martínez fue localizado en una cuneta a la salida de la carretera A-63 en Grado, Asturias. Lo sorprendente de la historia es que pasaron seis días para que alguien se percatara de que había ocurrido un accidente con un vehículo y dentro se encontraba un cadáver.

Fueron unos testigos del lugar que se comunicaron con la Guardia Civil a través de una llamada de emergencia al 112, aproximadamente a la una de la tarde y de inmediato se trasladó a la zona una patrulla de Seguridad Ciudadana de la estación de Grado y verificaron que en efecto se trataba de un accidente.

El coche Ford focus se encontraba atrapado en una zona poco visible, los efectivos bajaron hacia el automóvil y encontraron dentro a un hombre sin vida.

Posteriormente procedieron a activar un operativo de rescate para poder recuperar el cadáver. Un par de horas después se trasladó una grúa de amplias dimensiones y se iniciaron las labores de salvamento. Después de un arduo trabajo por fin se logró sacar el coche de la zona.

Entre las personas que se acercaron al lugar se encontraba un médico forense, varios funcionarios de la Guardia Civil de Tráfico y de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil. Solamente personal autorizado para poder dar certificación del fallecido y proceder al levantamiento del cadáver.

Una vez realizados los debidos procedimientos el fallecido fue trasladado al Instituto de Medicina Legal para entregarle el cuerpo a sus familiares.

Familiares estaban angustiados por la desaparición del occiso

La familia de Florentino López Martínez llevaba al menos más de seis días de angustia en su búsqueda. Desde que salió de su casa el 19 de julio su esposa y dos hijas vivieron momentos de desolación por no saber en donde se encontraba el hombre.

Desafortunadamente, su familia estuvo durante varias horas a la espera del cuerpo a las puertas de la morgue, donde se le realizó la autopsia de rutina para determinar cuál fue la causa real de su muerte y poder esclarecer qué fue lo que le sucedió. Según declaraciones de la familia, el funeral de Martínez se celebró el día jueves a las 13 horas en la principal iglesia de Cangas del Narcea.

Posteriormente se procedió al entierro en la comunidad de Navelgas, en el cementerio parroquial.

Florentino tenía a Gijón como segundo hogar

El fallecido tenía su vivienda principal en Cangas de Narcea, una comunidad del suroccidente de la región, sin embargo, Florentino tenía a Gijón como segundo hogar.

Desde hace varios años estuvo a cargo de un reconocido taller de motos conocido en la comunidad como taller El Escudero de quien era dueño desde el fallecimiento de su padre. Aunque en la actualidad el negocio se mantenía cerrado, seguía visitando la ciudad por asuntos personales.