Increíble pero cierto. El pasado 4 de junio de 2015 hacia las 10:30 de la mañana un conductor se dirigía a la población salmantina de Carbajosa de la Sagrada por la carretera provincial SA-20 cuando la Guardia Civil detuvo el vehículo con el que conducía y le pusieron una infracción de tráfico por importe de 80 euros. La razón que dieron los agentes para interponer esta multa fue que se estaba mordiendo las uñas mientras manejaba el coche.
Un simple gesto, el de llevarse las uñas a la boca, que le ha acarreado al hombre, del que no se ha conocido su identidad, 80 euros de multa por la Dirección General de Tráfico.
Según el papel de la infracción cometida que ha aparecido en las redes sociales a través del Twitter de "Salamanca Radares", la sanción se realiza por "conducir el vehículo reseñado sin mantener la propia libertad de movimientos. Conducía mientras se mordía las uñas".
La multa de la Dirección General de Tráfico puede tener un 50% de descuento, siempre que sea abonada antes del 24 de junio por la persona que cometió dicha infracción de tráfico en esta carretera provincial con dirección a Carbajosa de la Sagrada, una población de la periferia de Salamanca.
Esta peculiar infración de tráfico no es la única de la que se tiene noticia en las últimas semanas. Hacia finales de mayo otro conductor fue multado en una carretera de la provincia de León por coger un chicle de una caja.
Según el papel de la infracción de la Dirección General de Tráfico la multa se produjo por "conducir un vehículo sin mantener la atención permanente a la conducción. Circula a la vez que manipula una tableta de chicles". La multa por coger un chicle de una caja también fue de 80 euros, igual que en el caso de Salamanca.
En ninguno de los dos casos las infracciones de tráfico llevan asociada una pérdida de puntos del carnet de conducir. En difinitiva, dos sucesos anecdóticos y que seguro no hicieron mucha gracia a los conductores que recibieron las infracciones. ¿Y a ti por qué te han multado?