Francisco Nicolás González, conocido como El Pequeño Nicolás, ha sido condenado a un total de tres años y cinco meses de prisión por hacerse pasar por un colaborador del CNI. El excolaborador de TV se enfrenta con la tercera condena en su contra por suplantar a un enviado de la Vicepresidencia del Gobierno.
Francisco Nicolás asegura que fue el empresario quién le pidió ayuda
El Pequeño Nicolás ha sido condenado por la Audiencia de Madrid a tres años y cinco meses de prisión por dos delitos –falsedad documental y usurpación de funciones– por la causa abierta sobre el engaño al conocido empresario Javier Martínez de la Hidalga, aunque el joven ha salido absuelto por el delito de estafa, por el que también había sido procesado. En la mencionada sentencia, que El Pequeño Nicolás puede recurrir ante el Supremo, los magistrados también le imponen el pago de una multa de 8.550 euros.
El fallo sí que ha contemplado como atenuante la de dilaciones indebidas pero no la que solicitaba la defensa de El Pequeño Nicolás, la de alteración psíquica.
El juicio tuvo lugar los pasados días 25 y 26 del mes de octubre y el día 7 de noviembre, en la Audiencia Provincial de Madrid juzgó al controvertido Francisco Nicolás Gómez Iglesias. La fiscalía solicitaba seis años de prisión por un delito continuado de falsedad de documentación oficial, por estafa y por usurpación de funciones –públicas–, ya que el joven se hizo pasar por un contacto del Gobierno para lograr engañar al mencionado empresario dentro de la operación de compraventa de una finca ubicada en Toledo.
La Fiscalía solicitaba una condena de seis años de prisión mientras que el partido político Podemos, que ejercía la acusación popular, solicitaba el máximo, doce años. Su defensa, en todo momento, defendía su total absolución y, si fuera condenado, que se tuviera en cuenta como atenuante una alteración de su salud psíquica.
El Pequeño Nicolás negó, a lo largo del juicio, que cometiera el delito de estafa al mencionado empresario y aseguró que fue la presunta víctima la que le pidió ayuda para poder cerrar la operación y que llevase a cabo la elaboración de un documento falsificado para poder convencer a la compradora sobre la adquisición de la finca.
El Pequeño Nicolás reconoce que le gustaba llamar la atención llevando documentos falsos
El joven reconoce que en aquella época, según su versión, colaboraba con el CNI (Centro Nacional de Inteligencia) y le gustaba llevar carpetas que imitaban documentos oficiales para poder llamar la atención.
El empresario también negó que fuera estafado por el excolaborador de televisión, ya que le devolvió los 25.000 euros que le había dado y llegó a decir que tenía una “confianza total” en el joven conocido como El Pequeño Nicolás pues era amigo de todo el mundo, incluido del Gobierno y era “un genio precoz”.