Un adolescente de 15 años ha fallecido, en un parque del madrileño distrito de Villaverde, por arma de fuego durante un enfrentamiento entre bandas. Otro hombre, de 21 años de edad, también resultó herido grave durante la trifulca, también por herida de bala, según han explicado fuentes de la investigación.

El suceso tuvo lugar en el popular barrio madrileño de San Cristóbal

La pelea tuvo lugar alrededor de las 23:15 horas de este mismo domingo en un parque para niños situado en la calle Angosta, en el barrio popular de San Cristóbal, en la zona sur de Madrid.

El periódico El Mundo ha recogido la declaración de los testigos del asesinato: el presunto agresor sería un hombre joven, de origen latinoamericano, sobre 1,60 metros de altura y que llevaba puesta una chaqueta de color azul, gorra roja y una mascarilla oscura.

Los efectivos del Samur y de Protección Civil que llegaron a la zona se encontraron a la víctima en parada cardiorrespiratoria. Tras realizar las maniobras de reanimación durante 40 minutos no consiguieron revertir el estado y el adolescente falleció, según fuentes del equipo de Emergencias de Madrid.

Los sanitarios también asistieron al otro herido, un hombre joven de unos 21 años de edad, que tenía una herida en la zona del abdomen, también, provocada por un arma de fuego.

Una vez fueron capaces de estabilizarle fue traslado al Hospital Doce de Octubre y su estado es grave.

Una psicóloga miembro del Samur se encargó de atender a los progenitores del menor fallecido y a un amigo que fue testigo del terrible suceso. La Policía Nacional es la responsable de la investigación del caso y señalan que podría ser un nuevo incidente relacionado con las bandas violentas juveniles.

Las cámaras de seguridad serán fundamentales en la investigación

La hipótesis que gana fuerza es un nuevo enfrentamiento entre las bandas juveniles que se encuentran en la ciudad y sería el quinto asesinato, en lo que llevamos de año, de este tipo solo en la capital. La edad del joven asesinado, unido a las circunstancias en las que ha tenido lugar el suceso, indicarían que sería resultado de un nuevo enfrentamiento entre bandas violentas juveniles.

Los testigos del caso aseguran que el agresor iba con mascarilla y encapuchado -por lo que no era posible identificarle-, se dirigió directamente al adolescente y le pegó un tiro en la espalda y en la nuca. La víctima, junto al herido, se encontraban sentados en unas mesas situadas en una explanada del mencionado parque infantil ubicado en San Cristóbal. Tras los disparos, la zona se ha llenado de residentes, pues el parque se encuentra rodeado de edificios de viviendas. Tanto los testigos como las cámaras de seguridad de los negocios cercanos serán claves para la investigación.