Flor Peña y a Alberto Venera son dos policías nacionales que recientemente fueron premiados por sus labores contra el maltrato animal. Ahora, los oficiales llevan 5 meses sin estar en sus puestos de trabajo y se les prohíbe patrullar, y se han dedicado a trasladar a los detenidos a los juzgados, algo que ambos policías califican como un castigo. A pesar de que en un período de 2 años han incautado a 40 ejemplares de perros y otros Animales que estaban en situación de peligro, estos policías están siendo castigados, según sus palabras, porque el maltrato animal no es prioridad para sus superiores.

El pasado 6 de octubre fueron galardonados, junto con otros colegas de la Guardia Civil y la Policía Local por parte de la Red de Protección Animal (REPA) en colaboración con la Dirección General de Derechos de los Animales del Gobierno de España. Sin embargo, ambos agentes no pudieron recibir su premio con su uniforme como sus colegas, puesto que su comisario no les había dado permiso para asistir, pues según su superior sería “su última humillación”.

Los policías debían enfocarse en 'cosas más importantes'

Si bien el comisario de Alcalá de Henares ha evitado hacer declaraciones. El sindicato SUP, al que pertenecían ambos agentes, tras analizar el caso han comentado que ellos no seguían los cauces apropiados para tramitar estas denuncias. Otras fuentes de la policía también comentaron que los agentes nacionales se deben enfocar en “cosas más importantes” y a quienes les corresponde investigar casos de maltrato animal es a la policía local.

Según estas fuentes, los agentes estaban dejando de cumplir con sus funciones, además no se estaban tratando los temas de acuerdo al protocolo, por lo que se les advirtió en reiteradas ocasiones, por lo que fueron retirados de las calles.

Otros policías nacionales no han tenido problema

Ante estas afirmaciones, los agentes defienden que el maltrato animal está recogido en el Código Penal, por lo que consideran que cualquier agente puede actuar bajo cualquier delito.

A esto se le suma que hace un año 50 policías nacionales, a los que ellos se incluyen, recibieron un curso de cómo actuar ante denuncias de maltrato animal que fue organizado por el sindicato SUP y sus superiores no tuvieron problemas.

Su caso destaca, puesto que la policía nacional Montserrat Torres, de Huelva, también fue galardonada el pasado 6 de octubre, pero a diferencia de sus colegas, ella no tuvo problemas con su comisaría, y su jefe le permitió hacer un reportaje. Mati Cubillo, presidenta de la asociación Justicia Animal, que forma parte de REPA, les ha dado la razón a los agentes, puesto que la asociación denuncia casos de maltrato a los agentes nacionales y municipales por igual. Ambos policías han decidido llevar su caso a los juzgados por acoso laboral.