La lava no es el único riesgo que está provocando la erupción del volcán de La Palma y que está devorando todo a su paso. Otro problema reside en las emanaciones gaseosas que la columna de humo dispersa en la atmósfera. Se calcula que cada día entre 6.000 y 9.000 toneladas de dióxido de azufre son emitidos desde las entrañas de la Tierra a la atmósfera por las nuevas y diversas bocas del volcán canario.

Materiales geológicos en la atmósfera que emite el volcán

La erupción libera gases y materiales con distintos tipos de toxicidad. La columna de vapor de agua y fuego provocada por la actividad del volcán trae también otros materiales geológicos, como mercurio, magnesio, bromo, arsénico y ácido clorhídrico, además del dióxido de azufre.

Stavros Meletlidis, vulcanólogo del Instituto Geográfico Nacional destinado a la zona de la erupción, trae algo de tranquilidad en medio de la catástrofe. El científico especifica que los efectos peligrosos para la salud están restringidos a diez kilómetros a la redonda de la actividad eruptiva y que “no hay riesgo para la población, si se respetan las indicaciones de Protección Civil”.

Los vulcanólogos se encuentran en este momento con un arsenal tecnológico monitoreando el minuto a minuto de la actividad del volcán de La Palma porque las primeras 72 horas son fundamentales para entender el comportamiento de su actividad piroclástica.

Aviones, drones, imágenes satelitales y estaciones meteorológicas hacen un seguimiento En Directo de la evolución. Según los vientos que soplan, explican los meteorólogos, las emanaciones están yendo hacia el mar, alejando las emanaciones de las poblaciones de El Paso.

No acercarse al volcán para admirar su belleza

De todos modos, el geólogo Nahúm Méndez explica que podría ser nocivo para la salud porque el dióxido de azufre que se encuentra en la columna de cuatro kilómetros de altura, junto con el agua se puede transformar en ácido.

Este ácido en las vías respiratorias puede provocar daños, molestias o irritación en ojos, aparato respiratorio o en la piel.

Por ello es muy importante no acercarse al volcán y respetar las recomendaciones de los vulcanólogos en cuanto al cierre perimetral de diez kilómetros. No acercarse ni por curiosidad ni para hacer una fotografía, pese a lo que puede significar la belleza natural del espectáculo.

Recomendaciones para evitar problemas de salud

Las recomendaciones del gobierno de Canarias a su población sugieren quedarse en casa, con puertas y ventanas cerradas, y no salir más que lo imprescindible, con ropa que cubra brazos y piernas, mascarillas y gafas. Tampoco comer al aire libre, lavar muy bien frutas y verduras, ya que todo está invadido de cenizas, y tapar los depósitos de agua potable.

Todo esto en cuanto a la salud humana.

Pero también hay otro tipo de recomendaciones, en cuanto a la limpieza de techos, patios y veredas: la recomendación es barrer y embolsar las cenizas, evitando que taponen los alcantarillados. Y no conducir: los Coches en su andar levantan más las cenizas, y si es una cuestión de fuerza mayor, no hacerlo a más de 40 kilómetros por hora porque el polvo en suspensión en el aire puede romper los motores.