Paul Wynn tenía 57 años y la ilusión de poder casarse con su pareja desde hace veinte años, Alison, de 38 años, con la que tenía 11 hijos en común. Todo este anhelo después de tanto tiempo venía después de que a Paul le diagnosticasen en 2019 un Cáncer de páncreas. La familia sabía que aquella terrible noticia lo cambiaría todo y que Paul no se habría querido ir de este mundo sin casarse con su pareja.

Sin embargo, el pronóstico fue empeorando con el tiempo y el cáncer comenzó a hacer metástasis, extendiéndose al hígado y los pulmones. Sabían que no tenían mucho tiempo, así que decidieron adelantar la boda pero, desgraciadamente, el mismo día de la celebración, cuando Paul se dirigía al altar, cayó desplomado y falleció a pocos minutos de cumplir su sueño.

Después de conocer el diagnóstico adelantaron la boda

Paul y Alison, originales de Irlanda, habían formado una enorme familia a lo largo de los años, de la que Paul era el cabeza de familia. Es por eso que, cuando llegó la trágica noticia de su enfermedad, todo el panorama familiar cambió. Después de haberlo pensado mucho, el hombre, que ya habría comenzado a sentir los estragos del cáncer, decidió pedirle matrimonio para, de una vez, oficializar el enlace con Alison.

Sin embargo, los médicos tenían malas noticias para ellos ya que, sin que lo esperara, detectaron que su enfermedad se había extendido a otros órganos vitales y su vida estaba tan comprometida que le daban como máximo dos meses de vida, por lo que rápidamente quisieron adelantar la fecha de la boda para el 19 de julio.

Falleció a pocos minutos de poder casarse

Sin embargo, todos los esfuerzos de Paul y su familia se vieron errados el mismo día del enlace. Paul ya estaba en una condición muy vulnerable y asumiendo que su momento estaba próximo a llegar, pero mantenía la esperanza de consolidar su enlace y poder casarse con Alison.

Ese mismo día, vestido de traje y ayudado por su familia, habría intentado caminar hasta el altar con su prometida pero, momentos antes de que llegara darse el "sí quiero", Paul se desvaneció y el cáncer acabó pudiendo con él, falleciendo al momento y dejando a todos consternados.

Cuando los equipos de emergencia llegaron, ya no se podía hacer nada.

No había recibido ningún tratamiento

La familia le ha querido hacer un homenaje y lo han recordado como un hombre y un padre ejemplar. Sus más de 10 hijos y Alison han quedado consternados con este esperado pero trágico desenlace. La mujer ha reconocido que Paul no estaba recibiendo ningún tipo de tratamiento, razón por la cual el triste desenlace ocurrió tan rápido y sin apenas poder tener capacidad de reacción ante el avance de su enfermedad.