Margarita del Val, viróloga del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), pasa por ser uno de las referencias al hablar sobre la pandemia de este virus. Por este motivo, sus opiniones son tenidas en cuenta por buena parte de la población española. Aunque en esta ocasión ha dicho cosas sobre el coronavirus que seguramente no gustarán a las personas. Para empezar, ha puesto de manifiesto que no quedará más remedio que seguir durante mucho tiempo con las mascarillas, con un plazo de “al menos dos años”.
Para apoyar esta aseveración constata que “las próximas temporadas de otoño, invierno y primavera no van a ser para nada normales y habrá que afrontarlas con una serie de medidas excepcionales”.
Aunque matiza que todo dependerá al fin y al cabo de las vacunas y los tratamientos antivirales. De todas formas, su advertencia más dura consiste en que “temo que vamos a tener que volver al confinamiento domiciliario más estricto”.
La vacuna contra la pandemia del coronavirus no será tan rápida
Otro de los aspectos en los que incide Margarita del Val es en la fecha en que estará disponible la vacuna contra el COVID-19. Y en este sentido, sus predicciones no son para nada optimistas en cuanto a la rapidez de los proyectos clínicos, al exponer que “si tuviera que darle una fecha, el año 2022 sería optimista”. No en vano, apunta a que debe tenerse en cuenta que las dosis necesitan de su supervisión y aprobación para que sean seguras y eficaces y este proceso puede durar bastante tiempo.
Por tanto, considera que en los próximos meses no quedará otra opción que “aguantar”. Además afirma que el virus se mantiene durante muchos días en la superficie.
Margarita del Val: 'Se necesita conciencia social'
De todas formas, la viróloga del Consejo Superior de Investigaciones Científicas opina que la vacuna contra este virus no es la única solución para combatir a le enfermedad vírica, sino que por el contrario, ofrece otra alterativa como es la conciencia social, tal y como han venido desarrollando en los países del estilo del sudeste asiático.
En cualquier caso, avisa de que tendremos que convivir a partir de ahora con las epidemias de estas características, al constatar que “surgen cada dos años, como por ejemplo la gripe aviar, pero por suerte no todas se transmiten muy bien entre personas”.
Restricciones en el trabajo presencial
Sobre las medidas que deberían decretar las autoridades políticas de nuestro país, Margarita del Val es muy clara en su exposición.
En primer lugar, considera que “debería restringirse el trabajo presencial con la finalidad de que al final haya menos gente en el transporte público”. Y da una receta que es ciertamente original por su planteamiento y que consiste en “que la gente que no pueda gastarse dinero en mascarillas se les ofrezca una de forma gratuita”. Pero sobre todo ve prioritario que se lleven a cabo muchos diagnósticos y localización de los contagios. Porque por último, ve a mucha gente que está fatigada a pesar del cierto relajo que se ha producido en este verano.