Durante los inicios de la pandemia, muchos médicos mostraron su preocupación por aquellos pacientes que consumían medicamentos para controlar la presión sanguínea alta, ya que en un primer momento fueron considerados nocivos para quienes padecían el virus. Por su funcionamiento, se pensaba que facilitaba la entrada del Coronavirus al organismo y por tal motivo recomendaron la suspensión de la medicación.
Tras la inminente posibilidad de una segunda oleada de coronavirus, la investigación en relación a la seguridad de estos fármacos adquirió mayor relevancia.
Es así que la Universidad de Argelia Oriental en Reino Unido, se dedicó a analizar en profundidad los efectos de este tipo de fármacos durante el avance del virus.
El estudio reveló que reducen el riesgo de presentar patologías graves o la muerte causada por COVID-19
Los datos revelaron que un 33% de pacientes redujo los síntomas negativos. Pacientes que consumían 2 tipos específicos de medicamentos para la presión sanguínea alta tales como los bloqueadores de los receptores de la angiotensina (también conocida como ARB) y los inhibidores de la enzima convertidora de la angiotensina (también llamada ACEI).
Los ARB y los ACEI son medicamentos que actúan directamente sobre el sistema RAAS (Renina-angiotensina-aldosterona), que se encarga de regular la presión sanguínea y el equilibrio de fluidos y electrolitos.
En un principio se creyó que estos fármacos podían maximizar la expansión de una proteína que se encuentra en la parte externa de algunas células llamada enzima convertidora de angiotensina 2 (ACE2).
Esta proteína (ACE2), ayuda a controlar la presión sanguínea alta y además facilita la entrada del coronavirus a las células del organismo, y es por esa razón que se consideró perjudicial.
Pero una vez que los estudios se profundizaron, se conoció que los pacientes que habían consumido ARB y ACEI presentaban resultados contrarios a los supuestos.
Estos medicamentos podrían ofrecer protección real en contra de la infección
Aunque de momento las respuestas no están claras al 100 %, se sabe que los pacientes que consumen ARB y ACEI son capaces de resistir con mayor efectividad el virus.
Vale la pena estudiar dos puntos importantes, el primero de ellos y es que aunque estos fármacos están diseñados para aumentar los niveles de ACE2, no se ha comprobado que realmente lo hagan.
Como segundo punto, se debe considerar que las infecciones causadas por el COVID-19, pueden provocar en algunos casos una sobre reacción de la secuencia del RAAS (que es precisamente lo que combaten estos medicamentos) e inflamación.
Aún el estudio continúa, pero ha recomendado que los pacientes que presentaban presión sanguínea alta, deberán seguir consumiendo sus medicamentos, ya que se ha demostrado que son seguros y eficaces. Por otra parte se ha planteado la idea de prescribir esos fármacos a pacientes graves por COVID-19, pero esto representa otra investigación y un control clínico aleatorio.
Durante el desarrollo de la pandemia se fueron conociendo los síntomas y medicamentos que reducen el riesgo
Es importante recordar que hasta el momento se han revelado muchos manifestaciones desconocidas relacionados con el coronavirus, y es un tema que sigue en constante estudio y descubrimiento tanto de síntomas como de posibles medicamentos que ayudan a contrarrestar los efectos virales.
Lo cierto es que la pandemia continua su avance, afectando ya a más de 34 millones de personas y superando el millón de fallecidos. Se espera que medidas radicales como el confinamiento en algunas ciudades, logre reducir el número de contagios diarios y el desarrollo efectivo de una vacuna para el 2021 pueda frenar en gran manera la pandemia.
Dentro de los síntomas relacionados con la presencia de coronavirus en el organismo, se presenta fiebre, tos seca, fatiga, dolor corporal y de cabeza, dolor en la garganta, perdida del gusto y olfato. Otros síntomas se pueden relacionar con la conjuntivitis, erupciones cutáneas en la piel y la falta de color en los dedos.
La mejor manera para evitar la transmisión del virus es quedarse en casa, más aún si se tienen síntomas leves, ya que se ha comprobado que una persona portadora, podría contagiar a más de 10 en poco tiempo. Por tal motivo se siguen estudiando maneras efectivas frenar aún más la cantidad de contagios confirmados.
Estados Unidos, India, Brasil, Europa entre otros, son regiones que se encuentran dentro de las más afectadas, mientras que en España los contagios han llegado a superar los 10.000 casos en 24 horas pero se ha logrado reducir el número en los últimos días.
Mientras tanto, el avance de la pandemia sigue, alcanzando hasta al día de hoy 1.024.599 de personas fallecidas y 34.365.861 casos confirmados; mientras que en España las cifras llegan a 778.607 de casos confirmados por PCR y 31.973 fallecidos, según el portal rtve.es.