Hasta este momento, el debate sobre las mascarillas se derivaba de si esta estrategia era la más eficaz para contener los contagios de Coronavirus entre la población. Pero ahora este planteamiento sanitario se ha venido abajo tras la publicación de un artículo en la New England Journal of Medicine en el que se pone de manifiesto que sus beneficios van más allá de esta actuación para la prevención del virus en las vías respiratorias.

Debido a que expone que el uso de las mascarillas podría ayudar a minimizar los efectos de la COVID-19. Incluso se va más lejos al advertir que puede crear inmunidad en los usuarios.

En este caso, la explicación se debe a que el estudio constata que una baja carga viral es muy propicia para la producción de anticuerpos. De todas formas, se indica que esta posibilidad no está contrastada científicamente, aunque con grandes opciones para que sea un hecho real.

Nuevo sistema para crear inmunidad ante el coronavirus

Los expertos afirman que de confirmarse esta hipótesis se estaría ante un novedoso sistema para crear inmunidad en la población a través de las mascarillas. Y lo que es más importante, se podría detener la expansión del coronavirus por todo el mundo, en unos momentos en que existe gran preocupación entre la comunidad científica por la incidencia de la segunda oleada del virus.

Mientras que se está a la espera de que puedan comercializarse las primeras vacunas que harán frente a la pandemia.

Con síntomas menos graves

"Está claro que las mascarillas reducen la cantidad de partículas virales que están en el aire, por lo que, las personas contagiadas por el virus generarían una dosis más baja y como consecuencia de esta actuación los síntomas serían menos graves", ha afirmado George Rutherford, uno de los autores del informe que ha aparecido en la prensa especializada inglesa.

Este hecho podría contener la aparición de nuevos casos, aunque falta su confirmación. No en vano, las investigaciones sobre las mascarillas se han llevado en unos momentos en que su uso es obligado en buena parte de los países en el mundo. Tanto en espacios al aire libre, como en los cerrados, como por ejemplo comercios, locales de ocio nocturno y entretenimiento.

Menos fallecimientos con la mascarilla

En este sentido, los especialistas de la Universidad de California, en Estados Unidos, llegaron a la conclusión de que las personas que usan mascarilla para protegerse del virus tenían tasas de enfermedad menos graves y con menos fallecimientos en comparación con las que no utilizaban esta norma preventiva. Constatando de esta manera la tesis que ha aparecido en la prensa de Gran Bretaña. España es uno de los países que avalan esta información al presentar los últimos contagios un menor nivel de mortalidad debido al uso obligatorio de la mascarilla.