Malas noticias en la lucha por el Coronavirus: Alemania ha decidido reinstaurar la cuarentena tras un grave brote, que es seis veces superior al que se ha detectado en la ciudad de Pekin. Las autoridades alemanas, ante la gravedad del brote confirmado esta misma semana, han decidido poner a miles de ciudadanos en cuarentena en una de las regiones más importantes del país, Renania del Norte- Westfalia, tras detectar un gran brote de coronavirus cuyo epicentro sería un matadero industrial. Un hecho que recuerda al brote que se detectó en un matadero en Lleida hace unas semanas, pero con muchísimos más contagiados.

En Alemania se han contabilizado 657 nuevos casos positivos en coronavirus en la zona de Rheda- Wiedenbrueck

Según la versión de las autoridades alemanas, el rebrote fue detectado a lo largo de tres días en la fábrica de productos cárnicos de la empresa “Tönnies” en la zona de Rheda- Wiedenbrueck y ya se han contabilizado 657 casos positivos en coronavirus. El problema es que este brote multiplicaría por seis el tamaño del que se ha detectado en la ciudad de Pekin, en el mercado de productos frescos de Xinfadi, que ha provocado que las autoridades chinas decidan decretar la alerta máxima, ante la posibilidad de que se repita lo vivido el pasado mes de diciembre.

Alemania ha decidido confinar a unas 100.000 personas para evitar la expansión del coronavirus

Por el momento, Alemania ha tomado la decisión de cerrar todos los centros escolares cercanos a la fábrica y han establecido que una cifra cercana a las 100.000 personas deberán permanecer confinadas hasta nuevo aviso en un intento de frenar la expansión del coronavirus.

Según ha informado la agencia DPA, el matadero que se ha visto afectado por este nuevo brote de coronavirus es uno de los más importantes de todo el país y el parón en su actividad puede implicar el freno de hasta un 20% de la cadena de distribución de producto cárnico en todo el país.

La mayor parte de los empleados de la fábrica estarían afectados por la pandemia

Sven-Georg Adenauer, administrador del distrito federal de Gütersloh, (muy cerca de la zona de Bielefed, en la zona noroeste de Alemania) ha confirmado que este nuevo brote por coronavirus ha afectado a la mayor parte de los trabajadores de la fábrica. Muchos de ellos, además, comparten vivienda y otros tienen hijos que están en edad escolar, lo que habría provocado que la expansión del virus haya sido mucho más rápido que en el primer brote de la pandemia. Por el momento, Alemania ha tomado la decisión de cerrar completamente las distintas escuelas infantiles que existen en la región. Por tanto, hasta la vuelta de vacaciones de verano, los niños de la región afectada no tendrán clases.

Igualmente, el brote que afectó la semana pasada al barrio de Neuköllm sigue activo, en la capital berlinesa, y ya habrían confirmado 70 nuevos casos de contagio por coronavirus y el Gobierno ha decidido mantener en cuarentena a cientos de familias que están repartidos en un total de siete bloques. El objetivo es parar la expansión del virus y que la curva de la pandemia siga siendo decreciente. Con estos datos, se puede asegurar que Alemania vuelve a la casilla de salida de la pandemia por el coronavirus.

A lo largo de las últimas horas, Alemania ha registrado un total de 345 nuevos contagios positivos por el coronavirus, aunque el protocolo que sigue el Gobierno y los distintos landers ha dejado establecido que se reactivarán todas las medidas de control a nivel social si alguna zona, sea cual sea, posee una incidencia de 50 casos por cada 100.000 habitantes, un ratio que se ha superado de manera sobresaliente, por ejemplo, en el brote mencionado en el matadero de Renania.