El ex-presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha sido pillado “in fraganti” mientras se salta las medidas de confinamiento establecidas por el Gobierno para luchar contra el Coronavirus. Un vídeo publicado en LaSexta, en exclusiva, muestra al ex-líder del Partido Popular haciendo deporte por las calles de la urbanización en la que vive, sin que nadie le diga absolutamente nada.
Mientras los ciudadanos españoles llevan desde el pasado día 15 de marzo metidos en casa sin salir, solamente si la causa es justificada, el que fuera Presidente del Gobierno ha decidido no cumplir las medidas decretadas en el Estado de Alarma anunciado por Pedro Sánchez, debido a la pandemia del coronavirus.
Los vecinos del ex-político no entienden que a él se le permita salir a la calle y al resto, no
Pues bien, según el programa “Al Rojo Vivo” de LaSexta, no toda la ciudadanía está respetando la cuarentena. Y, una de esas personas es Mariano Rajoy, ex-presidente del Gobierno, que se saltaría de manera habitual las medidas de confinamiento para salir a realizar deporte en las cercanías de su vivienda.
Según el presentador del espacio, Antonio García Ferreras, el ex-político suele salir de su casa para hacer ejercicio y los vecinos están bastante enfadados por este comportamiento, no entienden cuál es la razón por la que él sí y los demás no.
La reportera del canal La Sexta ha revelado que el ex-líder popular suele salir “de manera habitual” y las fotografías más recientes fueron realizadas este mismo Domingo de Resurrección.
En estas imágenes, se puede ver a Rajoy totalmente equipado para hacer ejercicio, con un pulsómetro incluso.
Está completamente prohibido salir a la calle, si no es por causa justificada
Hay que recordar que el Gobierno de Pedro Sánchez dejó claro que quedaba decretado el Estado de Alarma y realizar deporte en la calle estaba completamente prohibido.
El Estado de Alarma solo permite salir a la calle en caso justificado, ya que toda la ciudadanía debe permanecer en sus hogares, para adquirir artículos que sean de primera necesidad, ir a trabajar siempre que tenga un certificado por parte de la propia empresa o para ir a un centro hospitalario para recibir atención sanitaria.
Cualquier persona que se resista a obedecer o que desobedezca, de manera grave, a la autoridad, tras la entrada en vigor del Estado de Alarma, se podrían enfrentar a una condena de prisión, que iría entre los tres a los doce meses. Y, por otro lado, podrían enfrentarse a una multa entre 601 y los 30.000 euros a aquellas personas que sean captadas incumpliendo lo establecido por el Estado de Alarma.