Emmanuel Macron ha decidido extender las medidas de confinamiento más restrictivas hasta el próximo 11 de mayo en toda Francia. Esta decisión se toma ante la expansión de la pandemia del Coronavirus y el aumento durante los últimos días del número de personas fallecidas y en el número de contagios en todo el territorio galo.

Mientras tanto, España ha decidido dar por finalizado este mismo lunes, la “hibernación a nivel económico”

Los empleados van a empezar a trabajar otra vez, siempre que sean servicios no esenciales y sin que puedan realizar sus funciones por teletrabajo: industria, la limpieza, cuidado o construcción.

Para poder facilitar su vuelta, se han facilitado mascarillas en los puntos logísticos más importantes del país. A pesar de las críticas, el Gobierno ha asegurado que el reparto se ha hecho de manera normal y se ha realizado en todas aquellas comunidades autónomas donde el lunes de Pascua no es festivo.

Pero, el confinamiento seguirá ya que su “desescalada” no tendrá lugar hasta dentro de dos semanas, sin descartar en ningún momento que las restricciones podrían reforzarse, incluso, después del día 26 de abril. Los posibles efectos negativos de haber permitido esta movilidad para asistir al trabajo se reflejarán en los datos de contagios y muertes de dentro de dos semanas.

Lo último en reabrir sería el sector de la hostelería: cafés, restaurantes y bares

Después del 11 de mayo, Francia ya tiene un plan completo para poder ir realizando la salida del confinamiento de manera escalonada: las personas mayores seguirán dentro de sus casas y los niños regresarán al colegio. Eso sí, hasta el próximo mes de julio ni los restaurantes, cafés y bares.

El Presidente lo ha hecho público a través de una alocución que ha ido dirigida a toda la nación y donde ha explicado el plan de salida que tendrá lugar después del confinamiento por el coronavirus. Será de manera escalonada, paso a paso. Desde ese día se reabrirán los liceos, guarderías y escuelas. Pero no reabrirá la universidad que acabará este curso sin clases de manera presencial.

Por tanto, hasta mediados del próximo mes de julio estarán cerrados: los museos, restaurantes, bares, salas de espectáculo, cafés, teatro y los festivales que suelen tener lugar en verano. A partir de ese día, se espera que Francia esté en condiciones para poder llevar a cabo los tests a todas las personas con síntomas.

Los que den positivo en las mencionadas pruebas tendrán que estar confinados y recibirán atención por parte del sistema sanitario. Además, habrá máscaras para toda la ciudadanía francesa y este mismo lunes se ha presentado un proyecto para una posible aplicación del seguimiento de aquellas personas que den positivo en el test.