Un nuevo ataque en contra de dos barcos petroleros en la zona del golfo de Omán ha vuelto a disparar las alarmas en la zona. Uno de los barcos cargueros, que se encontraba entre Emiratos Árabes e Irán y pertenecía a una empresa de nacionalidad noruega. Algunas fuentes indican que el ataque se realizó con torpedos dirigidos directamente contra los susodichos barcos petroleros.

Las alarmas en la zona del golfo de Omán han vuelto a saltar este mismo jueves, tras el ataque de dos barcos carguero en aguas del golfo de Omán. Los dos barcos petroleros han sufridos dañados y sus tripulaciones han tenido que ser evacuadas mientras se están evaluando si era un ataque intencionado, según ha informado a los medios de comunicación la V Flota de los Estados Unidos.

La zona del ataque ha sido en las puertas del conocido estrecho de Ormuz, en el mismo lugar donde ya se han realizado ataques a otros cuatro buques hace justo un mes.

La noticia de este nuevo ataque ha provocado que el precio del crudo haya aumentado un 4% y el precio del barril ya estaría en 62 dólares

La zona en la que se están llevando a cabo esta serie de sabotajes está muy cerca del estrecho de Ormuz, una zona por donde transitan uno de cada tres barcos petroleros (petróleo comercializado por vía marítima) y una quinta parte de todo el petroleo que se consume en todo el mundo.

Tras los sabotajes del mes pasado, Estados Unidos ha acusado a Irán de amenazar con cerrar el paso de barcos por este paso de gran valor estratégico.

Teherán ya ha negado todas las acusaciones y la investigación que ha presentado Emiratos Árabes Unidos (EAE) a los expertos de la ONU solo indicaba que había un Estado detrás de los sabotajes, pero no se sabía cuál sería.

Según el portavoz de la mencionada V Flota de los Estados Unidos, Joshua Frey, cuya base está en Bahrein, dentro de la zona del golfo Pérsico, su oficina recibió dos llamadas de SOS en dos ocasiones, a las 6,12 hora local y a las siete.

Dichas llamadas fueron realizada por do barcos petroleros que habían sido objeto de un sabotaje.

Por otro lado, el ataque tuvo lugar en aguas entre los territorios de Emiratos Árabes Unidos e Irán

IRNA, agencia de noticias de Irán, ha informado que las autoridades marítimas ya han rescatado a un total de 44 trabajadores de dos petroleros de bandera extranjera tras un sabotaje en el mar de Omán y dichos trabajadores fueron trasladado a un lugar seguro, al puerto de Bandar-e Jask.

Los dos petroleros atacados fueron el Front Altair (de Islas Marshall) y el Kokuka Courageous, que navegaba con bandera de Panamá.

Según medios iraníes, el primero estaba transportando etano desde Qatar a Taiwan, cuando sufrió un incendio a las 8.05 (hora local), a unas 25 millas del puerto de Jask. Dos horas más tarde (9.50 hora local) tuvo lugar un incendio parecido en el segundo buque, a unos 30 millas del mencionado puerto de Jask que iba desde Arabia Saudí hasta Singapur con metanol.

En Tradewindsnews, web de información marítima, ha afirmado que un barco petrolero de una empresa de nacionalidad noruega, Frontline, y otro de la empresa Schulte (bajo bandera de Singapur) fueron alcanzados por torpedos cerca de la costa de Fujaira, uno de los siete miembros que forman parte de la Federación de Emiratos Árabes Unidos.

Según el medio, las tripulaciones habrían tenido que abandonar los petroleros tras escuchar varias explosiones. Además, el Kokuka Courageous tendría un boquete importante justo encima de la línea de flotación del barco.

El periódico de Noruega, VG, citando fuentes cercanas a la compañía, ha publicado que el carguero Front Altair sufrió un incendio a consecuencia del ataque, aunque los 23 tripulantes pudieron ser rescatados por un barco que estaba en las proximidades.

Otra empresa, en este caso, la BSM Ship Management, cuya sede está en Singapur, ha comunicado que su barco, el Kokuka Courageous, ha sufrido daños en un sabotaje que ha ocurrido en el golfo de Omán. Las 21 personas que formaban parte de la tripulación de susodicho petrolero acabaron siendo recatados por el Coastal Ace, una embarcación que estaba a poca distancia.

La carga no estuvo en ningún momento en peligro ni hubo posibilidades de que el carguero acabase hundido.

El Kokuka Courageous estaba a unas 14 millas náuticas de la costa de Irán y a unos 70 de Emiratos Árabes Unidos. Estas distancias se han hecho públicas a través de la web Marine Traffic que se encarga del control del tráfico marítimo en la zona.