La artista Rosa Montesa ha decidido crear una versión muy especial del “vestido bikini” que lució Cristina Pedroche en las últimas campanadas pero realizado con material reciclado.
Es una de las grandes sorpresas en esta edición de Las Fallas
El diseño floral que sorprendió en la última gala de Las Campanadas de Antena 3 se ha realizado con botellas de plástico que se han pintado de colores como el rojo, el fucsia o el morado, además de hueveras y bolsas de la compra.
Este vestido tan original y con una fuerte carga simbólica se va a exponer en el escaparate del taller de la propia Rosa Montesa en la capital valenciana durante los días que tenga lugar la fiesta de Las Fallas.
La artista decidió hacer este vestido tras escuchar a la propia Cristina Pedroche decir que el vestido que lucia no se podía realizar con material reciclado y eso encendió la bombilla de su imaginación.
La reconocida emprendedora, que ha estudiado Diseño Industrial pero que, a causa de la grave crisis económica que se inició en el año 2008, redirigió su trayectoria laboral y convirtió su verdadera pasión por reciclar materiales y convertirlos en Arte,
En esta edición de Las Fallas tiene previsto exponer un total de tres vestidos, en el escaparate de su propio taller en una calle del centro de Valencia. Son una copia exacta del modelo de vestido bikini que fue elaborado para Cristina Pedroche en las últimas navidades utilizando flores de organza; pero, se han utilizado materiales como botellas de plástico que se han teñido de colores tan llamativos como son el rojo, el fucsia o el morado.
También encontramos bolsas de plástico de color rosa palos y las típicas hueveras de cartón que, como todo lo anterior, se tiñó con estos colores.
Para Montesa, este proyecto ha sido un verdadero reto profesional ya que, por poner un ejemplo, las flores realizadas en plástico fueron recortadas y modeladas utilizando calor y, después, se cosían directamente en el sujetador.
La cola del vestido se realizó con el plástico que se emplea para embalar y la capa se hizo con un plástico especial que se emplea para hacer paneles de publicidad, por ejemplo.
Las sandalias del maniquí también portan flores realizadas con los mismos materiales
Rosa ha revelado que fue ayudada por su propia madre que tiene 90 años de edad. No es la primera vez que hace un vestido con material reciclado: hace unos años ya hizo, de esta manera, un vestido de fallera, con corpiño, manteletas, falda y todos y cada uno de los complementos.
Cortó el plástico en pequeños pedazos y los fue uniendo como si fueran un 'trencadís', lo que provocó que su trabajo fuera duramente criticado.
A través de su blog, Reciclado Creativo, cuenta cómo se puede hacer arte con un trozo de tela o una bolsa de plástico de un supermercado, cuerdas, cápsulas de café (que son muy difíciles de reciclar)... y convertirlos en flores, lámparas, bisutería, objetos de decoración....