La calle Ordines en Sant Llorenç des Cardassar en Mallorca ha resultado la más afectada desde que el martes de la pasada semana comenzó a llover de manera torrencial en ese lugar del país, ocasionando inundaciones y graves afectaciones a muchas familias españolas que están sufriendo por los rigores de los desbordamientos.

Muchas historias dolorosas se conocieron al final de la tormenta, porque en la zona llovía copiosamente, situación que no permitía a los vecinos tomar las medidas de protección necesarias para evitar ser alcanzados por el aguacero.

El periódico El País reportó la gravedad de los hechos, señalando que las grúas no han parado de tanto sacar enseres de uso doméstico, como muebles rotos, televisores y neveras, pertenecientes a las familias afectadas por los desbordamientos.

Nadal entre las aguas

De acuerdo con el reporte del diario El País, la estrella mundial del tenis Rafael Nadal se encontraba entre los afectados por las inundaciones en Sant Llorenç des Cardassar, y trató de pasar desapercibido en el interior de un garaje, situación un tanto difícil para una persona como él por su notoria popularidad como tenista profesional.

Justamente en la calle Ordines vivía Bernat, un hombre que rondaba los 70 años, y que resultó sorprendido por las lluvias en la cocina de su casa, desde donde fue arrastrado por una ola de lodo y murió.

Los familiares de Bernat piensan que estaba aún medio adormecido cuando entró el aluvión, y es probable que por esa razón no se haya podido movilizar con rapidez, para evitar ser alcanzado por las aguas, que finalmente lo arrastraron a su paso, falleciendo por inmersión.

Miles de personas expuestas

El Diario de Mallorca afirma en un trabajo publicado este sábado que el Gobierno español ordenó en el año 2010 realizar investigaciones de tipo cartográficas para determinar las zonas vulnerables, y establecer las políticas adecuadas para las emergencias relacionadas con fenómenos naturales, encontrándose que habían 10 áreas con Riesgo Potencial Significativo de Inundaciones, siendo ellas: Sant Llorenç des Cardassar, Sóller, Calvià, Campos, Manacor, Marratxí, Palma, y Pollença.

Revisando el impacto que podrían causar las riadas en esas comunidades autónomas, el Gobierno considera que unos siete mil mallorquines en la actualidad residen especialmente expuestos a sufrir las severas consecuencias de nuevas inundaciones, y en ese sentido, insisten en revisar las cartografías anteriormente ordenadas, para estar atentos en un futuro por si se presentan este tipo de problemas.