La derrota de la selección española ante la anfitriona Rusia, puede marcar un antes y un después. Mientras aún podían verse imágenes de los jugadores llorando en el campo ruso, Luis Rubiales comparecía ante la prensa.
Visiblemente dolido y con semblante serio, como no podía ser de otra manera, el presidente de la Federación Española de Fútbol ha declarado que no se arrepiente de la decisión tomada. Se refiere, evidentemente, a la inesperada salida de quien, hasta 48 horas antes de que comenzara el Mundial de Rusia 2018, fuera el entrenador oficial de la roja, Julen Lopetegui.
Con el despido de Lopetegui, el equipo, aunque nadie lo haya reconocido aún, ha visto cómo tambaleaba una etapa de trabajo y desestabilizaba el grupo. Rápido comenzaron las especulaciones de quiénes eran los jugadores que sabían que Florentino había fichado a Lopetegui para el Real Madrid y la firma ya estaba cerraba. También la llegada de Fernando Hierro como reemplazo del entrenador suscitó polémica, aunque el inminente comienzo del Mundial, dejaba sin más posibilidades a la roja.
La anfitriona no fue mejor que España durante el interminable encuentro del pasado domingo. Tal vez, por ello, el sabor agridulce del resultado final. Es parte del fútbol, no siempre ganan los mejores, ni los que se lo merecen más.
La cantidad de variables en un encuentro deportivo de estas características es tal que se hace hasta difícil mencionarlos.
No obstante, los aficionados españoles merecían una explicación y allí estaba Luis Rubiales, presidente de la Federación Española de Fútbol, para intentar dar alguna respuesta que calmara los decepcionados corazones.
Rubiales ha declarado que, en ningún momento, se ha arrepentido de despedir a Julen Lopetegui el 14 de junio, dos días antes que comenzara el evento deportivo más importante del mundo. También ha expresado que comparte su dolor y tristeza con el pueblo español que esperaba otro resultado, sin embargo, ha dicho que actuó "con responsabilidad y convicción", por ello siente la seguridad de seguir hacia adelante.
Por otra parte, consultado sobre el rendimiento deportivo del equipo español ha declarado que, ha sido superior en todo momento y que la sensación final es que ha ganado un rival que no estaba a la altura de la selección española.
Es, precisamente parte de ese juego, que a la afición ha aburrido y molestado. Una serie de pases y toques que no acaban en nada y que terminaban por decantarse en jugadas sin sentido.
El incierto futuro de Fernando Hierro
Las opiniones más contradictorias se han dado en cuanto al trabajo del seleccionador español, Fernando Hierro. Están quienes, como él mismo, aseguran que tienen toda la responsabilidad de la derrota. Sin embargo, achacarle el mal juego del equipo a Hierro sería desmedido e injusto.
Teniendo en cuenta que asumió una responsabilidad que pocos habrían aceptado y tuvo que hacerse cargo de un equipo que en cuatro años tuvo tres entrenadores. Solo 48 horas tuvo Fernando Hierro para reacomodar a un grupo de jugadores que estaban entre el desconcierto y la incertidumbre.
Luis Rubiales ha declarado la tarde del domingo, que durante las próximas, se analizará el futuro del seleccionador. Ha argumentado que con el dolor de la derrota no es recomendable tomar decisiones como estas. Por su parte, Hierro ha declarado en lo que parece una nota de despedida, que ha sido un honor trabajar con los actuales jugadores. "Vamos a buscar nuevas fórmulas y construir una Federación de futuro", ha declarado Rubiales apenas terminar el partido. Consultado por el posible penalty a Piqué ha contestado que no va a reclamar.