Los gastos de la vuelta al cole resultan económicos, si su hijo ya ha superado la etapa de la guardería. Una de las más complejas para los padres que, tras decidir si al pequeño lo llevan a una pública o a otra privada, es probable que en ninguna de las dos haya plazas.

El coste de las guarderías públicas es mucho más accesible, evidentemente, sin embargo, los costes no son iguales.

Los ingresos familiares determinan qué cuota abonan los pequeños. En estas, el niño debe permanecer un mínimo de entre 6 y 7 horas en la institución, por lo tanto, el comedor debe abonarse obligatoriamente. Este importe puede reducirse si la familia lo necesita, el pedido debe realizarse por escrito y esperar la resolución final.

En las guarderías privadas existe mucha diferencia según la oferta académica que ofrece y el distrito en el que se encuentra. Salvo algunos centros que pertenecen a cadenas que mantienen el precio indiferentemente del barrio, por lo general existen variaciones notables en el valor de la cuota mensual.

Unas cuatro horas de guardería privada ronda los 250 euros mensuales, sin contar el menú o el desayuno, pero puede llegar a costar 350 o 400 euros al mes. El uniforme suele costar desde 100 hasta 200 euros, según las prendas que se adquieran.