Hace apenas unos días, el presidente de Ciudadanos lamentaba que su actividad en política perjudicara a sus padres y familia. Lo decía en la relación a los afiches y pintadas que el comercio de sus padres había recibido la noche anterior. Uno de los principales propulsores del diálogo entre el gobierno y Cataluña y defensor de la inconstitucionalidad del Referéndum independentista ha sido uno más de los primeros en recibir los ataques de los radicales catalanes.
Por otro lado, las convocatorias populares han comenzado a circular desde los centros educativos de Cataluña.
Algunos directivos han enviado una nota circular a los padres de los estudiantes para que autoricen a sus hijos a salir antes de la institución para participar de una marcha contra las presiones para que no se realice el referéndum.
Desde algunas universidades, que han decidido suspender las clases para que los alumnos pudieran manifestarse, consideran que es un ataque al gobierno catalán.
Este pasado jueves, cerca de 2.000 alumnos marcharon para reclamar por la represión política, cualquiera sea su forma y su ideal. La iniciativa no está encabezada por ninguna agrupación particular, sino que ha sido algo conjunto.