El sector de la hostelería no es el único que hace honor de contratos precarios y abusivos. Existe otro, en el terreno opuesto, que además son autónomos y tienen exclusividad.
Uno de los puestos con mayor demanda en la Actualidad, es también, uno de los peores trabajos posibles. Cabe destacar que no todos los Community Manager o Social Media, están bajo este yugo, sin embargo han aumentado los influencers y las pseudo agencias de marketing y comunicación que, a cambio de algunos euros exigen firman contratos de confidencialidad en los que el cliente nunca sabrá quien maneja sus cuentas.
Es decir, el cliente creerá que la agencia a la que ha contratado es quien lo hace, pero en sus post y comentarios, en las fotografías y los hashtag habrá un periodista intentando hacer malabares.
Los contratos de confidencialidad tiene clausulas abusivas y absurdas, como que el redactor no podrá trabajar, de por vida, con el cliente a quien le publica en redes sociales.
Nada, pese a que suele ser la cláusula mejor pagada de ciertos contratos (en otros oficios o profesiones) en el sector de la comunicación, no se paga extra.
El famoso "negro de los escritores" ha evolucionado, si puede llamarse así.