La timidez puede convertirse en un serio problema para los más pequeños de la casa, ya que, puede provocarles serios problemas para socializar y para desarrollar sus habilidades de comunicación en la etapa adulta, lo que es un gran déficit en la sociedad actual.

Por eso, los padres deben ayudar al pequeño y, según los psicólogos habría ocho puntos claves para potenciar la seguridad de los más pequeños, su confianza y mejorar su autoestima, que suele ser muy débil en el caso de los niños muy tímidos.

1. Hablar con los más pequeños, tener una buena comunicación con ellos y dialogar sobre lo que ellos sienten al entablar amistad con otros niños o tener que enfrentarse a nuevas situaciones.

Siempre hay que apoyar al niño, para que gane confianza y más seguridad en sí mismo.

2. Ir, poco a poco, enseñándole a vivir nuevas experiencias: ir al parque a conocer a nuevos niños y jugar con ellos, organizar otras actividades en casa con otros niños.

3. Hacer que tenga relaciones positivas con otros niños, siempre que le guste estar con ellos y que le beneficie, eso sí, poco a poco y sin forzar la situación.

4. Jugar con ellos a actividades con las que se sientan muy cómodos, que les gusten y que hagan que se vayan soltando y que vayan ganando confianza en sí mismos, poco a poco.

5. Es una buena idea quedar con amigos que también tengan hijos de esa edad y, así, todos podrían jugar juntos, en un ambiente mucho más familiar, lo que hará que el niño gane seguridad en este tipo de actividad.

6. No exigirle jamás ni decirle que vaya a jugar con niños y dejarle solo. Debe hacerlo de forma gradual, poco a poco, y evitando tanto palabras como situaciones negativas.

7. Actividades extraescolares que realmente le gusten. Así se sentirá mucho más seguro y hará nuevos amigos, se irá rompiendo la barrera de la timidez.

8.

Evita situaciones que puedan provocar ansiedad en el pequeño y que su seguridad se reduzca. Eso podría ser un paso atrás, un problema para el pequeño, si lo que estamos haciendo es luchar para que se vuelva más abierto y no sea tan tímido.

Recuerda que la timidez puede convertirse en un grave problema en la edad adulta que limite a la persona y que le aísle del mundo y que no sea feliz.

Por esa razón, los padres deben ayudar a los pequeños a romper esa barrera psicológica, poco a poco y respetando el ritmo del niño/a, para que vaya abriéndose y haga amigos, realice actividades nuevas y esté más seguro en sí mismo.