La Mujer del traje color rosa fucsia sigue desgranando sus más de veinte años de silencio. Como la propia Rocío Carrasco declara desde el mismísimo título del documental donde ella y su voz son los protagonistas: ‘Rocío: contar la verdad para seguir viva’ que transmite Telecinco.

La muerte de Rocío Jurado, punto de inflexión

A ese punto Rocío le da entidad a su documental: da por sentado que hablar, contar, es lo que le asegura la vida. El capítulo del 14 de abril, llamado ‘Algo se me fue contigo’ afronta la muerte de su madre Rocío Jurado, que ensombreció a España entera.

Claramente, España lloró a la artista, pero a Rocío se le fue su madre.

Pero la desaparición física de Rocío Jurado no es solo la muerte: es tomada como un punto de partida para Rocío Carrasco en la relación con sus hijos: “Me arrepiento de haber firmado ese convenio”, declara sobre el tratado de tenencia de sus hijos con Antonio David Flores. Hablando de sobreentendidos, Antonio David siempre sostuvo que había sido el primer español en conseguir ese tipo de convenio, pero Rocío lo desmiente categóricamente: "A él no le han dado la custodia compartida ningún juez, ni nadie que no sea Rocío Carrasco Mohedano".

Se rompe la confidencialidad del convenio de tenencia

La hija de ‘La Jurado’ basa su arrepentimiento porque piensa que firmar ese contrato aliviaría la situación de reclamo y denuncia permanente que mantenía el exguardia civil desde ‘Crónicas marcianas’.

Pero el trato de confidencialidad que había propuesto se rompió en pedazos a los pocos días: a los tres días de firmado tal convenio, más precisamente el 18 de junio de 2013, Lydia Lozano relata los términos del acuerdo. A Rocío Carrasco no le cabe ninguna duda que la fuente de esas informaciones filtradas era el propio padre de sus hijos.

Rocío propone una situación totalmente contraria a la siempre sostenida por su exmarido, porque el convenio que firmaron fue de facilidades que ella misma ofreció, que incluía que los pequeños Rocío y David estuvieran quince días con cada uno de sus padres. Inclusive Fidel Albiac estuvo de acuerdo, pero que ella se arrepintió a las pocas horas.

Antonio David es quien no firmaba el acuerdo, según Rocío Carrasco

Denuncia que firmó el acuerdo de tenencia de los Niños, pero que Antonio David era el que no lo quiso firmar durante los seis meses subsiguientes: Según ella, Antonio David no quería tener a sus hijos, “los ha querido pedir y ha ganado dinero pidiéndolos”. Fue con una llamada al abogado que consiguió que él firmara el acuerdo.

La mujer, con voz grave, acusadora y en llanto, habla de la preocupación que vivía en esos tiempos con respecto a sus niños: que estaban cansados, que estaban rodeados de adultos cuando pasaban los días con su padre, pese a que “siempre me he encargado que esos niños quisieran estar con su padre y siempre me he encargado de decirles todo bueno de su padre”.